4ever Yours (16) Stop and Erase.

Marina colgó. Se sentía abrumada por toda la enorme situación, con el peso de todo lo que había pasado bajo sus hombros; se sentía agobiada y culpable, pero al mismo tiempo que se le deslizaban un par de lágrimas por la mejilla, miraba el teléfono y sonreía.

-Que tonta…- pensaba para sí misma.

Al tiempo que dejaba su móvil en la mesita de su habitación, vio el portátil y se acordó de que tenía un trabajo, un trabajo en el que no duraría mucho.

-¡Dios mío la traducción!- se levantó de la cama y fue a por el portátil, tropezando torpemente dadas las prisas, aunque tras reponerse por fin lo alcanzó.

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Estaba sentada en la biblioteca, todo estaba en silencio. Oía pasar las hojas de los libros, mi propia respiración, y los pasos de las personas que buscaban entre las estanterías. También notaba su mirada, no me dejaba concentrarme.

Sentía una incipiente picardía dentro de mí, lo que me hizo abandonar mi concentración, cerrar los libros, y levantarme. Eché una mirada a la estancia, tranquila y sin perturbaciones. Otra persona se levantó; mis labios dibujaron una sonrisa, me giré y me dirigí a la puerta.

Sabía que no estaba sola. Seguía andando por los verdes jardines del campus con aire provocador mientras me giraba y lanzaba seductoras miradas por detrás de mí. Sin previo aviso, mi acompañante desapareció ayudado por el dorado brillo que desprendían los rayos del sol al esconderse.

Seguí andando esperando una señal, pues sabía que la cosa no acabaría ahí; no me equivoqué. Poco más de unos segundos después, me vi rodeada por unos brazos tras de mí. Una suave mano se entrelazó con la mía y me guió hasta la entrada de un edificio cercano, donde reinaba la oscuridad, salvo por las rendijas de luz que lograban colarse en el interior, dando un aire tenue y misterioso a la estancia.

-At the end, you caught me…-me puse contra la pared, permitiendo que me rodeara cara a cara por completo.

-You got me…I couldn’t wait until we were at home- el tono de su voz lo decía todo.

-Louis…- poco a poco, sus labios se acercaron a mi cuello, y el calor de sus besos me encendió por completo.

A tientas, en medio de aquella penumbra, el tacto jugaba un papel fundamental, y era algo verdaderamente placentero. Me susurraba al oído mientras yo le quitaba la camiseta. Él me tomó en volandas y perdimos el control. Sin saber dónde pisábamos o qué podría pasar, nos fundimos en una sola persona gracias a la pasión que ambos de sobra derrochábamos.

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-Bueno, sí según tú Louis se lo ha tomado tan bien, ¿Puedo empezar a llamaros Zarina? – Zayn acababa de colgar el teléfono desde su nuevo cuarto justo a tiempo para que su nuevo roomate lo acribillara a preguntas.

-¿Zarina?-.

-¡Yeah! Zayn and Marina, Zarina! Isn’t original?- el colorete que asomaba en el rostro de Niall daba pruebas de cómo trataba el sol al irlandés- like couples in Hollywood -.

-Are you Happy with it?- el chico miraba gracioso como su compañero asentía sonriente.

-Why I can’t get one? Maybe I could steal your girlfriend or Liam’s- ese comentario le costó al chico un cojinado, e hizo que Zayn pensara en la palabra “novia”.

-Girlfiend…- su teléfono sonó convenientemente, era Rebecca. Sería la ocasión perfecta para decirle que iría a verla mañana mismo.

-Hi…honey- se sintió tremendamente culpable.

-Hi love, How is going in Spain?- la voz aterciopelada de la segunda finalista de X Factor sonaba al otro lado del teléfono.

-An amazing holidays here, sunny weather, great company… How are you?- sería más difícil de lo que había previsto, se le estaba cayendo la cara de vergüenza y se le había hecho un nudo en el estómago, pero había tomado una decisión.

-I’m great honey, but I miss you-.

-Yeah…- no pensaba mentirle diciéndole que él también; de hecho, no se había acordado de ella en todo el viaje- You’ll see me soon, tomorrow. I’m going to fly to UK-.

-No- la respuesta fue precisa y tajante- I have a better plan. What if I visit you in Spain? It sounds great to be there; however, these are your holidays and I don’t want to spoil it. So, I’ll buy a ticket right now and I’ll go tomorrow morning. I can only spend one day, but it’s better than nothing-.

-Emm…- le costaba contestar a eso, Con un día tendría suficiente para hablar las cosas, pero que dicha conversación se produjera en España expondría a Marina, y eso no le apetecía en absoluto- Becks, I think…- en seguida la voz telefónica le cortó. Niall vio la cara de susto que de repente puso su amigo y sonrío, apartándose más tarde para dejarle privacidad.

-I don’t take no for an answer- ella también estaba decidida- We can do a lot of funny and nice things in that city-.

Por mucho que discutió con ella e intentó negociar, Rebecca estaba dispuesta, así que terminó colgando sin poder hacer mucho al respecto. Pensó, aunque ya era tarde, que debería llamar a Marina para contarle lo sucedido, aunque lo que realmente le apetecía era llamarla para decirle cosas bonitas y estar hablando durante horas sobre temas irrelevantes, felices, sin nada que preocuparse salvo quién colgaría primero.

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Traducía lo más frenéticamente posible, necesitaba terminar entre hoy y mañana si quería “seguir en el negocio” aunque su cabeza estaba muy lejos de donde podrían estar sus ojos o sus dedos en aquel preciso momento.

Le envió a Martin un mensaje para que se pasara lo más tarde posible mañana, habían quedado ese mismo viernes, pero necesitaba también ese día para intentar que le diera tiempo a hacerlo todo.

Su mente, sin embargo, divagaba. Soñaba con que podría ser posible que al llegar a Los Ángeles, todo fuera a pedir de boca, que los desfiles hubieran marchado bien, que los chicos siguieran como siempre, que ella y Zayn por fin pudieran estar juntos…¿un sueño? Aún no lo sabía.

Si todavía no le resultaba lo suficientemente difícil concentrarse en el trabajo sucio, su móvil volvió a sonar; soñó con que podría ser Zayn, y para su sorpresa, no se equivocó.

-Hola…-Marina respondió risueña a la llamada.

-Hi sweetie… How are you?-.

-¿Te refieres desde hace 15 minutos cuando hemos hablado por última vez?-.

-Me pregunto…me pregunto cómo he tardado tanto; Escucha, ¿Recuerdas que te dije que me iba?-.

-Si… ¿Ya no te vas?- era una gran noticia.

-No…ha habido cambio de planes, resulta que…- ¿cómo iba a decirlo?- que…ha sido Rebecca la que ha decidido venir aquí-.

-¿¡Qué?!- no había sido tan buena noticia después de todo, acababan de surgirle multitud de inseguridades- pero… ¿Cómo has dejado que pase?-.

-Ni siquiera lo sé, pero va a venir mañana… por suerte, es solo un día- Marina no contestó, se hizo el silencio en la conversación y Zayn tuvo que seguir- Marina, te lo prometo, esto acabará pronto, hablaré con ella-.

-Confío en ti Zayn, sé que sabrás qué hacer- Marina deseaba con todas sus fuerzas que todo marchara bien.

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Me desperté llena de sudor y abrazada a Liam.

¿Qué había pasado? ¿Qué demonios había sido eso? No dudé en acercarme aún más a Liam; podía sentir como dormía por el ritmo de su respiración y la forma en que se hinchaba sutilmente su pecho. Discretamente, me separé un poco de él intentado no despertarle y me incorporé en la cama. Durante unos segundos, mi cabeza solo daba vueltas, no daba crédito a lo que acababa de soñar.

Estaba segura de querer a Liam, entonces ¿Por qué aquel sueño? Si algo sabía, era que el subconsciente raramente tiene lógica, y hace lo que le da la gana la mayoría del tiempo pero, ¿En serio? Quizá solo era una reacción a todo lo que había pasado aquel día…

Me levanté y fui a por mí móvil. Antes de saber a quién llamar, ya estaba escribiendo:

“¿Cómo te encuentras? ¿Dónde estás? Todo ha pasado tan rápido que ni siquiera me ha dado tiempo a preocuparme por ti! Estoy aquí, 4 whatever you want. Xo J”

Estaba cansada y claramente confundida. La ventana que daba al balcón estaba abierta, decidí salir a tomar el aire y despejarme.

-¿Tú tampoco puedes dormir?- Harry había tenido la misma idea que yo. No me había percatado de que su cama estaba vacía al despertarme- Siento lo de antes, Demi, esto no iba contigo-.

-No te preocupes Harry, lo entiendo. Todo lo que ha pasado ha sido…una completa locura- corría  aire cálido y agradable- es raro para todos, no eres solo tú-.

-Me alegro de que lo veas así…-.

-Pero no puedes estar enfadado con Zayn para siempre-.

-¿No puedo?- nos cruzamos las miradas en lo que fue la parte más intensa de la charla, sin ni siquiera palabras- No puedo…se me pasará, pero debía entender que las cosas no se hacen así, Louis es su amigo…-.

El móvil sonó: “Thx Blondie, you’re awesome; and don’t worry. Can I call you 2torrow? Xo”

-Marina también lo es…- seguía en la conversación mientras leía el mensaje y contestaba afirmativamente – Has sido muy duro con él, ¿no crees que también lo estará pasando mal?-.

-No había pensado en eso…-.

-Demi?- oí un susurro que provenía de dentro de la habitación.

-Tengo que volver Harry, piensa en lo que hemos hablado ¿vale?, y vete a dormir, no es bueno darle tantas vueltas a la cabeza- le sonreí y me dispuse a entrar.

-Demi…- Harry me detuvo- prométeme que no harás daño a Liam; lo quieres, ¿verdad?- su tono parecía de súplica, al igual que su mirada, aunque entendía perfectamente la preocupación que sentía.

-Harry, quiero a Liam, es más probable que sea yo la que salga herida… jamás le haría daño-.

-Él no te lo hará a ti…-.

-Harry, él… ¿él te ha dicho algo?- su tono dejaba algo a entrever, pero no sabía qué era.

-Nada…nada malo o que deba preocuparte al menos…-de nuevo aquel tono, esta vez acompañado de una leve sonrisa de medio lado.

-Demi?!- .

-¡Me reclaman! Liam debe preguntarse qué demonios estoy haciendo…- sonreí y de nuevo me dispuse a irme.

-Ah, y por cierto Demi, gracias… por todo- nos miramos durante unos segundos a los ojos de forma cómplice y concluimos la pequeña charla para entrar a la habitación.

-I love you…- me dejé atrapar por los brazos de Liam en cuanto llegué a la cama y me acurruqué junto a él.

-You’re the best of my life-.

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Había cerrado el libro y lo había metido en el bolso. Aquí las cosas eran diferentes, pero era de ese tipo de personas que se adaptaban en seguida; Además, conocía algunas palabras en español que le vendrían de perlas.

-¿Puedes explicar donde puedo tomarme un taxi?-.

Aquel recogido la hacía unos centímetros más alta, aunque los tacones también ayudaban. Era la más elegante del lugar, y lo sabía, aunque quizá había subestimado el buen tiempo de la ciudad.

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La puerta empezaría a arder en unos segundos si nadie la abría.

Liam me tenía rodeada por un brazo y ambos estábamos apoyados en el cabecero de la cama, riéndonos y desayunando cuando oímos los golpes. Harry fue el que finalmente se levantó a abrir la puerta.

-This isn’t real…- volvió de mala gana a la cama cuando vio a Marina al otro lado de la puerta.

- Necesito estar aquí, ¡quizá aquí pueda terminar esta dichosa traducción! ¡O quizá me sirva para no pensar en que Rebecca está aquí! ¿Os importa?- Liam casi tira el desayuno al intentar taparse el torso desnudo.

-¿Rebecca está aquí?-.

-Sí, ahora mismo está con Zayn, están…”hablando” o no sé… ¡estoy atacada!- la chica se sentó en nuestra cama- lo siento Liam, ¿os he interrumpido?-.

-It doesn’t matter… ¿Quieres que te pidamos una tila? Harry, ¿Quieres que te pidamos una a ti?- el chico aumentó el tono con la última frase.

-Forget it!- Marina puso cara de extrañada, aunque no le costó demasiado percatarse de que aún necesitaba tiempo para encajarlo todo.

-Party in? Zayn isn’t at the bedroom…- Niall acababa de entrar, la puerta seguía abierta.

-Será mejor que todos nos calmemos y luego nos expliques las cosas detenidamente, ¿de acuerdo?- me dirigí a Marina especialmente.

-Si… ¿Me dejáis que me cambie?-.

-¡Oh! Sí, perdón Liam…vamos Niall- ambos salieron de la habitación, me levanté y cerré la puerta; Liam por fin pudo moverse e incorporarse.

Harry salió de su cama y él también empezó a vestirse; nos miramos, de nuevo hablando con la mirada, con la que le suplique que se calmara y dejara que los acontecimientos se sucedieran solos. Terminé de vestirme y Liam acabó de colocarse los pantalones cuando oí un golpe justo detrás de la puerta. Liam se colocó rápidamente la camiseta y abrió la puerta, la estampa era inimaginable.

Niall estaba tras Marina, quién tenía la cara girada hacía atrás, con una gran parte en color rojo, y en frente de ella, Zayn intentaba calmar a Rebecca, que estaba llorando y en posición de ataque; no era difícil imaginar lo que acababa de pasar.

-How do yo…- Rebecca sollozaba mientras veía como Marina se reponía con ayuda de Niall.

-Rebecca…- la chica hizo amago de abofetear otra vez a mi amiga, lo que Zayn evitó cogiéndola por detrás. Ella se soltó violentamente y se puso firme.

-I can’t imagine how mean are you both- estaba indignada, obviamente no imaginaba nada de esto- You both are amazing! How could I be so stupid? You’re a bitch and you…- ni siquiera podia mirar a Zayn a la cara.

-Marina, come in- le pedí a mi amiga.

-Wait a second…- sin que nadie pudiera haberlo predicho, Marina asestó a la chica una bofetada que, si dolió igual que sonó, cualquiera hubiera temido recibirla.

Las dos se enzarzaron y tuvimos que separarlas; Niall y Liam me ayudaron a llevar a Marina dentro mientras Harry se quedaba en la puerta evitando que nadie entrara.

-You!…- Rebecca consiguió evitar a Harry y entró, hablando entre lágrimas- I hope you will be happy…- no dijo anda más, no intentó hacer nada, indignada, salió de allí y se alejó, fue lo último que dijo. Zayn parecía indeciso, sin saber a dónde ir, aunque finalmente también entró en el cuarto.

-¿Puede alguien, y quiero decir Zayn y Marina, explicarnos qué coño ha pasado aquí?-.