miércoles, 21 de septiembre de 2011

4ever Yours (40) Unbroken.


Cualquiera en su sano juicio pensaría que estoy loca, o algo aún peor.
No serían los únicos, yo también lo pienso.
El sol rozaba la línea del horizonte por última vez para mí en aquella cálida mañana. “No necesita ser perfecto, solo estar bien” pensé. Me senté en las escaleras de madera frente a la puerta de mi habitación; una fresca brisa conseguía descolocar levemente mi peinado, mientras mi mente iba mucho más rápido que eso.
Como si se tratara de algún telefilm barato, en mi mente también aparecieron divididas dos figuras, totalmente contrarias la una a la otra, ambas con razonamientos totalmente válidos y discutibles.
-¿No te das cuenta de que es una locura?- decía una parte de mí.
-No lo es, yo lo quiero, vamos a tener un hijo, es…-.
-No digas tonterías, él acabara abandonándote o algo peor; está centrado en su música y su vida-.
-No escuches, lo conoces, sabes cómo es, te quiere, y solo eso es suficiente…-.
-Pero…- me atreví a interrumpirme.
-¡No! ¡Basta! Seamos racionales, esto ni siquiera parece real. ¿Qué haréis luego? ¿Qué viene después de coger el avión de vuelta a…a dónde?-.
-No lo sé, yo…-.
-No habéis hablado de eso, pero os tenéis el uno al otro, ¿No te sobra como respuesta? Sabes que es cierto, míralo a los ojos, su corazón no te miente, todo irá bien-.
-Pues vaya garantía, ya no recuerdas…-.
-¡Basta!- dije para acallar mis voces internas.
Si algo estaba claro, es que estaba hecha un lío. La pasión y el romanticismo de aquella semana me habían hecho aceptar la proposición de Liam sin pensarlo ni un segundo, ¿Pero había hecho lo correcto? Ni siquiera habíamos pensado en ello… y no era algo que tomarse a la ligera cuando ya no éramos solo nosotros dos.
Tras varios minutos cavilando solo fui capaz de llegar a una conclusión: Liam y yo éramos soulmates, lo que significaba que estábamos destinados a estar juntos, a un futuro, todavía incierto.
-Te has levantado muy temprano…- la voz ya no salía de mis pensamientos, si no del hombre que me abrazaba desde detrás y me susurraba un dulce beso en la mejilla.

5+2

-Regla número uno: Si te pillo, se acabó el juego-.
-Me parece justo…-.
-Regla número dos: No vale salir de la casa, quien lo haga perderá automáticamente…-.
Zayn ponía sus reglas a Marina mientras ambos rodeaban el sofá de la planta de abajo, sin quitar el contacto visual el uno del otro.
-Regla número tres- añadió la chica ilícitamente- Yo decidiré a qué hora del día se hace efectivo el premio-.
-…está bien…- gruñó el chico entre dientes poco de acuerdo- Bueno… -.
-¿Qué?-.
-Solo queda una cosa por hacer… ¡Corre!-.
Volvían a la normalidad, o al menos algunos matices de ello lo hacían. Volvían a picarse, a desearse y a sacarse de quicio como de costumbre, con la diferencia de que la unión establecida esta semana los hacía más íntimos.

5+2

-Nena, cuando lleguemos ambos a la fiesta esta noche seremos los dueños; una noche triunfante para una gran despedida…-.
-Liam…- casi lo susurró.
-No one but us…-.
-Liam!- la chica esta vez sí se hizo oir- Stop Ok? You need to stop-.
-¿Qué ocurre? ¿Estás bien?-.
-Sí… pero lo siento, estoy muy confundida-.
-¿Confundida? ¿Con qué?-.
-Pues… contigo, con la proposición que…no sé si…- el chico se quedó petrificado ante los murmullos de su chica, no podía creerlo.
-Pero ¿Qué ha pasado? Demi, yo te quiero y…-.
-No te estoy diciendo que no ¿Vale? Solo digo que… ¿Cuál de todos estos Liam que has sido durante la semana me lo está pidiendo? Has estado muy raro este último par de días y… ya no sé a quién tengo delante-.
-Pues a mí…-.
-A ti, ¿Cuál de todos? ¿El Liam que conozco, adorable y cariñoso, o este otro Liam que tengo ante mí al que detienen y ni siquiera le importa?- volvía a estar sensible, le había dado demasiadas vueltas al asunto.
-Cariño, yo creía que esto era lo que querías…-.
-Pues te equivocas Liam. Yo quiero al hombre del que me enamoré. Está bien, un poco de lo que he visto esta semana ha sido genial, y no deberías renunciar a ello, pero no pagando el precio de cambiar totalmente quién eres-.
El chico ni siquiera pestañeó, simplemente dejó vagar a su cabeza por todo el entramado de palabras que la chica le acababa de soltar.
-Vale, me has pedido matrimonio, y he aceptado pero, ¿Tienes pensado dónde viviremos? ¿Tenias pensado decírselo a nuestros padres? ¿Qué hacer ahora? Son cosas que debemos hablar ambos; Liam, tu antes hubieras pensado en todo esto primero… y ahora ni siquiera sé si serás capaz de cuidar a un bebé…-.
Podía soportarlo todo, ya empezaba a dominar los altibajos emocionales de embarazada que padecía Demi, pero las últimas palabras se clavaron en su corazón como una bala.
Tras Demi apareció Danny junto a una chica que debía ser su hermana, ambos con sendas tablas de surf bajo el brazo. Parecían haber disfrutado de una agradable mañana en la costa. Hasta que no alcanzaron a ver al chico, ninguno se había percatado de que la discusión estaba teniendo lugar al aire libre.
-¡Demi! Tenéis que ir a probar las olas, el mar está un poco tranquilo pero… ¿Ocurre algo?-.
-No, nada Danny, no es nada… ¿Cómo estás?- la rubia no era la mejor actriz, sus sollozos y falta de tranquilidad la delataban en cada momento.
-No mientas… ¿Estás bien? ¿Ha pasado algo?-.
-Será mejor que no te metas Danny, esto es algo que tenemos que resolver entre ella y yo…-.
-Mira, ella está mal, y no  la voy a dejar seguir aquí y que se ponga peor; Demi, es mejor que te vengas conmigo y te calmes un poco-.
-No va a ir a ninguna parte…-.
-¡Liam!- la chica volvió a intervenir en la conversación- Danny tiene razón, será mejor que me despeje…será lo mejor…- hablaba para ella misma, hasta que clavó sus ojos en los de su novio- Piensa en lo que te he dicho ¿Vale? Lo hablaremos esta noche…en la fiesta-.
Entre lágrimas y amparada por el hombro de Danny, Demi le entregó a Liam su anillo de compromiso, algo que a ambos les partió el corazón.
-Espero que me lo devuelvas esta noche…te quiero…- Liam tuvo que contemplar como otro chico acompañaba a su novia lejos de él mientras intentaba calmarla. Él también se encontraba ahora sin saber que pensar sobre todo aquello.

5+2

Zayn…- la chica había encendido su vena provocativa, claro que él no se quedaría atrás.
Había cogido un par de coches del juguete del chico y su blackberry.
-Uno…- uno de los coches salió despedido por la ventana- Dos…ups!- el segundo coche incluso sonó más fuerte al chocar con en suelo- y…-.
-¡No!-.
-Sí, tienes razón…da demasiada pena…-dejó la BB de nuevo en la mesa.
-Tal vez como esto…- Zayn no quedó atrás, y en un abrir y cerrar de ojos, las gafas de sol de la chica desaparecieron por el mismo hueco que los coches.
-Zayn!-.
-Tú has pedido guerra…- el chico miró a sus alrededor hasta que encontró algo.
Cogió una pila de libros y revistas dispuesto a tirarlos de la misma manera por la ventana.
-¡No! ¡No, no no no! ¡Eso si que no! ¡Espera!- Marina se apresuró a coger “Forever Young” de dicha pila y guardarlo en lugar seguro. El resto del papel no corrió la misma suerte, y acabó reuniéndose con el resto de cosas; tras la ventana.
Ambos empezaron a tirar de todo por la ventana, incluidos ropa, ipods…de repente se miraron, sin saber cómo habían llegado a eso. Sin apartar la vista el uno del otro, rompieron en carcajadas de complicidad y, sin premeditación alguna, se fundieron en  un beso.
-Me has encendido…-.
-Recuerda que yo decido cuando te cobras el premio…-.
El chico la cogió por la nuca y la arrastró hasta el próximo beso. No podría cobrarse el premio entero todavía, pero nada le impedía disfrutar de un adelanto. Sus jugosos labios atravesaron  los de la chica para jugar.
Ella, sin embargo, se detuvo justo en el momento antes de que el chico entrecerrara sus preciosos ojos avellana; ojos en los que se podría perder sin posibilidad de encontrarse…ni ganas de hacerlo.

5+2

No entendía nada al principio, aunque poco a poco se dio cuenta de lo que pasaba. En cierta medida, era verdad que se había desmelenado durante las vacaciones, especialmente los últimos días, dónde según Demi se “había pasado de rosca” pero nadie podía culparlo. Quizá se había dejado llevar, pero nunca con mala intención.
Ahora estaba destrozado pensando que todo podría acabar, Demi le había insinuado que no podría ser un buen padre, y le había devuelto el anillo de compromiso; ahora tendría que pensar en qué hacer: desde luego, no renunciaría a Demi ni al bebé, eso lo tenía claro, solo debía pensar en la forma en la que hacérselo saber a ella, que estuviera segura de que él siempre estaría a su lado.

Había metido la pata. Le había dado demasiadas vueltas al asunto y se había dejado llevar por las hormonas, ahora estaba arrepentida. Quería a Liam con toda su alma, y nada cambiaría eso. Por supuesto, todavía pensaba que sería una gran pareja y un gran padre, no sabía que le había pasado, pero se lo haría saber, tenía que hacerlo.
Realmente, a ella le había divertido el nuevo Liam, y algo en ella deseaba que ese nuevo Liam se quedara, al menos de vez en cuando. Pero el cambio drástico de actitud de su chico le había provocado una inseguridad que tenía que borrar cuanto antes. Todo estaba yendo demasiado deprisa incluso para ella.
-Demi, será mejor que te distraigas, ven aquí…- ofreció amablemente Danny desde la otra parte de su habitación.
-Sí…tienes razón; gracias Danny- el chico envolvió a la rubia en un cálido y reconfortante abrazo-.
-Puedes estar tranquila, aquí tienes unos oídos para escucharte, unos brazos para abrazarte, y un rubio entero para hacerte reír cuando te haga falta- tras las palabras de apoyo la sonrisa era inevitable.

5+2

El agua de la ducha corría hacia bajo a temperatura ambiente propiciando una relajación inusual e inquietante en el chalet, todo estaba tranquilo, demasiado tranquilo, aunque no sería ella la que se quejara.
Salió de la ducha fresca y calmada, se anudó una toalla al cuerpo y salió del baño. La oleada de aire que la invadió al abrir la puerta era una de las mejores sensaciones que podía experimentar cuando se duchaba, y algo que le encantaba.
Por desgracia para el momento, Marina comenzó a oír un zumbido. Miró para todos lados pero nada. Siguió caminando hasta que volvió a oír el zumbido, cada vez más cerca, hasta que por fin vio de dónde venía: Un enorme abejorro, totalmente fuera de control se dirigía a ninguna parte dentro de su zona de confort, lo que la paralizó en un primer instante, para conseguir que gritara y corriera como una posesa al momento siguiente.
Entró en el cuarto y perdió instantáneamente el equilibrio. Chocó, provocando que su toalla, y la de aquél con el que se había chocado, se deslizaran ligeramente hacia el suelo, quedando ambos cuerpos totalmente pegados uno contra otro.
-¡¿Qué haces?! – Marina resbaló y se reincorporó en menos de un segundo, buscando torpemente su toalla.
-¿Yo? ¿Qué haces tú?- dijo el chico pícaramente. Desde luego no estaba desnudo sin razón aparente.
-Yo he salido de la ducha y me he encontrado un monstruo persiguiéndome que…- Marina se detuvo y ató cabos tras ver a su chico como Dios lo trajo al mundo…bueno, algo más contento- ¡Zayn! ¡Estábamos en un descanso!-.
-¡No! ¡No es verdad! -.
-¡Yo dije que decidiría cuando acaba la sequía! ¿Qué haces desnudo?-.
-No puedes negarme que te apetece…- el chico se acercó, sin reparar en su toalla, a la chica, que empezaba a no poder resistirse.
-¿Qué has hec…Zayn…- lo miraba y se quedaba sin habla, quería besarlo, era lo único que deseaba en ese momento.
El chico se las ingenió para acabar tumbando a Marina en la cama y deshacerse de la toalla.
-¿Qué eres, un barco?-.
-¿Por qué?-.
-Por como tienes el mástil…estas muy pero que muy contento hoy…-al ver la cara tan extraña que Zayn produjo, añadió unas palabras más- ¡No me quejo! Así está muy bien…-y con esas palabras, quedaba zanjada la política de secano.

5+2

Caía la noche, ya estaba preparada y esperando. Esperaba con todas mis fuerzas que él apareciera, quería explicarle que todo había sido una absurda estupidez.
Respiré profundamente y lo vi aparecer. Me sentía como una idiota allí de pie, vestida modestamente y esperando a que algo pasara; aquella nunca había sido una situación cómoda para mí.
Conforme se acercaba, mi corazón iba acelerando su ritmo, y a mi mirada le costaba mantener la suya, estaba muy nerviosa.
Cuando estuvo justo delante de mi, no pude reprimir el impulso de excusarme, antes de que me dijera lo que tuviera que decirme.
-Liam, ha sido un error, lo siento, yo… no sé lo que se me pasó por la cabeza ¡Somos crios! Es normal que queramos hacer locuras, no te culpo, te quiero, y no volveré a dudar de…- su dedo índice se posó suavemente entre mis labios haciéndome enmudecer.
-Solo…escucha; y ahí está el Liam que ha estado siempre- tras el susurro, de su bolsillo sacó un papel que parecía haber sido doblado demasiadas veces, me lo entregó, y siguió andando hacia delante, dónde lo perdí de mi campo visual.
Abrí el papel y me giré para encontrarlo con la mirada. Estaba sentado en el piano del que la fiesta disponía.
-This one is for you…- se giró y empezó a tocar; no tardé en reconocer la canción, ya la había cantado antes, y a mi particularmente me encantaba. Los acordes de My life would suck without you resonaban por el lugar, y especialmente dentro de mí, por lo que decidí que sería buen momento para leer lo que había escrito en el papel.
Las lágrimas, lejos de poder reprimirlas, estallaron en mis ojos.
Things to do before I die:
1.A family with Demi (L)”
Esto llevaba tiempo escrito, no podía creer lo estúpida que había sido dudando de él, ¡Pues claro que el verdadero Liam seguía ahí! Doblé el papel y lo estreché en mi pecho, prestando ahora total atención a los acordes del piano y las notas de su voz, que tanto me hacían soñar.

5+2

-Zayn… ¡Muevete de la cama! Vamos a llegar tarde… hemos quedado con Niall para ir al aeropuerto a recoger a Liam y a Demi, ¿Quieres mover el culo de ahí?- el chico ni se inmutó.
Marina estaba terminando de arreglarse y ni siquiera le estaba prestando demasiada atención a cualquier cosa que no fuera su pelo en esos momentos, pero le urgía que su novio estuviera preparado a tiempo para no llegar tarde.
-Me has dejado agotado... ¿No podrías ir tu sola?- raro.
-¡No! Me apetece ir contigo, Además, los DOS hemos quedado con Niall, ¿No le harás ese feo verdad?-.
-Es que…no puedo-.
-¡Zayn no seas crio! ¡En serio, vamos a llegar tarde!-.
La chica salió del baño tras colocarse el perfume y entro al cuarto a por el bolso. Lo único que alcanzó a ver fue un bulto envuelto en la sábana; su novio.
-¡Zayn!-.
-¡Necesito ayuda!-.
-¿Qué…qué pasa?-.
El chico se puso recto en la cama y el problema quedó a vista de todos. No era un problema pequeño.
-¿¡Pero se puede saber qué has hecho?!-.
-Estaba nervioso, hacía mucho tiempo que tu y yo no… y pensé que…-.
-¿Qué una ayuda te vendría bien? ¡Tienes 18 Zayn! A tu edad debería funcionar sin problemas…- la chica echó otro vistazo al “problema” y esta vez no pudo evitar una carcajada.
-No es gracioso…-.
-No te has visto bien…-.
-Pues llama a Harry y reíros de mí…esto no baja, y empieza a doler…-.

5+2

Se tiró sobre mí como si no me hubiera visto en tres años, y tras abrazarme, protagonizamos el beso perfecto.
-Y no llores más…-.
-Si es que soy tonta, todo esto ha sido culpa mia y…-.
-Olvidalo, ¡Olvidemoslo! Yo ya lo he olvidado- puso la mejor de sus sornisas. La forma que tomó su cara también me hizo asomar una pequeña sonrisa.
-¿Y qué hay de lo demás? ¿Dónde viviremos? ¿Cómo nos las vamos a apañar? Los médicos, nuestros trabajos, nuestros padres, el…-.
-No te preocupes más por eso ahora; no pienso separarme de ti ¿Vale? Hablaremos de todo esto más calmadamente luego, ahora no te preocupes más…-de su bolsillo sacó esta vez el anillo, anillo que había echado de menos en mi mano, y me lo vovlió a entregar, haciendo que algunas lágrimas rezagadas volvieran a salir, aunque él mismo se encargó de que cesaran poco después- Bailemos…-.
El momento mejoraba a cada instante y consiguió que me relajara, que lo dejara todo atrás…

El avión nos esperaba, y estábamos listos para irnos. Ya nos habíamos despedido de nuestras nuevas amistades y habíamos dejado la llave en recepción cuando mi móvil sonó.
-¿Mi madre? ¿En serio? ¡Mierda! ¿No tengo cobertura en toda la semana y justo ahora le apetece conectarme con el mundo?-.
-Cogeselo, quizá es un buen momento para…-.
-¡No! ¿Qué hago? No puedo mentirle…-.
-Pues no lo hagas…-.
-¡Hazlo tú!- le pasé el móvil-.
-No, es tu madre, habla con ella- me lanzó el móvil.
-¿Y que quieres que le diga? Hola mamá el trabajo y las vacaciones bien, estoy embarazada y me voy a casar, ¿Tu semana bien también?- miré la cara de Liam tras mi sarcasmo, al lanzar el móvil de un lado a otro, se había descolgado.

5+2

-Anda vístete… vamos al hospital-.
-¡Que vergüenza Marina!-.
-¿Y qué sugieres que hagamos?-.
-Aprovechar la subida…-.
-Es bueno saber que aún puedes bromear con eso… aunque no te gustará que te diga, que en ese estado podríamos…como decirte esto…- de su cara asomó una pequeña sonrisa- partirla-.
-¡¿Qué?! ¡Vamos al hospital! ¿A qué estas esperando? ¡Vamos!- Tardó menos de un minuto en levantarse de la cama y…vestirse, como pudo, preparado para salir.
-Avisaré a Niall de que… bueno de que no podemos ir por…esto. Él irá a recoger a la parejita al aeropuerto y explicará la situación-.
-No creo que…-.
-Oh, si, por supuesto se preocuparan por ti y vendrán a verte; el hospital está justo al lado de la casa de Demi; de esto no te librarás…-.
-Shit!-.
-¿Estás listo?-.
-Todo lo que puedo estarlo…-.
-Bien…-.
Marina cogió las llaves del coche, de la casa, lo cerró todo, y se dispuso a salir con el enfermo por delante hasta que sonó su móvil, había conseguido que sobreviviera a la guerra de lanzamiento de cosas que se había sucedido por la mañana.
- ¿Hola?-.
-Blondie!-.
-Louis! I’m not Demi I’m…- el chico la interrumpió.
-Demi, listen I’m in Ibiza and I miss you...I can’t forget… I love you Demi, I really love you so much…-.
-Louis, yo no soy…- el chico iba claramente borracho, la noche en Ibiza tenía esas consecuencias. Aunque si de algo estaba segura Marina, es que los borracho eran sinceros. Louis la había confundido con Demi.
-Can I tell you a secret? I miss you, and I want to see you son so…-la llamada se cortó inesperadamente.

domingo, 18 de septiembre de 2011

4ever Yours (39) Full moon.


Luna llena. Noche pura, no se vislumbraban apenas estrella es la pequeña isla de la preciosa Polinesia Francesa. La marea se hacía presente de una manera muy leve, sin necesidad de acapàrar atención inmerecida.
La pareja paseaba cogida de la mano.
-Gracias por la estrella… creo que es el detalle más bonito que nadie ha hecho por mí jamás-.
-Me alegro de que te guste, tampoco a mí me habían llevado antes de vacaciones románticas-.
-Solo nos quedan dos días…-.
Ambos suspiraron contrariados.
-¿Qué harás después?-.
-Seguiremos grabando, supongo. Aún hay mucho por hacer de cara al estreno del single. ¿Y tú?-.
-Puede que vuelva con Andy, aún no lo he decidido, también me gustaría centrarme un poco más en mis estudios.
-No quiero que nos separemos…-.
-Ni yo-.
La presión de sus manos ascendió imperceptiblemente, ninguno deseaba que aquello terminase.

5+2


Era hora de regresar a casa, habíamos pasado el día con Niall y ninguno deseaba que acabara. Tanto Zayn como yo nos habíamos disputado la atención del irlandés durante la mayor parte del tiempo, comenzó ganando mi contrincante ya que invitó a Niall a jugar con su nuevo Scalectrix, pero luego el juego dio una vuelta importante cuando los dos empezamos a comentar las últimas novedades de la celebridad Justin Bieber donde Zayn no pudo seguirnos.
Cabeceaba ligeramente en el viaje de vuelta en el taxi cuando me di cuenta que Zayn me miraba divertido, retándome a que finalmente cayera dormida. Mis sospechas aumentaron y giré mi rostro para no percibir su mirada.
-Deberíamos dejarlo ya-.
-¿Te estás rindiendo, Malik?- le miré desafiante, me dedicó una sonrisa cansada.
-Un empate no es tan mal resultado-.
-Pero la victoria es mejor-.
-Muy bien- cortó el contacto visual, dando por zanjada la conversación.
Maldito orgullo, acabaría con nuestra relación de la misma manera que ahora estaba aderezándola.

5+2

Amanecía en la Polinesia. La luz jugueteó con las pestañas de Liam hasta que consiguió despertarlo, vio a Demi junto a él en la cama, apoyada en su hombro. Salió de la cama en dirección al baño. Dejó que el agua helada recorriera su piel, ni siquiera reguló la temperatura, necesitaba el frío en aquellas mañanas tan cálidas. Salió empapándolo todo en busca de su ropa, desde hacía días no se preocupaba por su vestuario, podía pasar más de cinco horas sin cambiarse de ropa, resultaba fascinante. Recorrió con la mirada la habitación en busca de algo que ponerse, ya no sabía qué estaba limpio y qué no, su parte de la habitación era un auténtico desastre, miró, por el contrario la parte de Demi, sus maletas seguían un orden riguroso y su ropa permanecía perfectamente planchada en el armario.
Demi se revolvió en la cama reclamándole, abrió los ojos y se encontró con el recién salido de la ducha, quien no puso reparos en seguir en su estado de desnudez, tampoco ella dio muestras de incomodidad ante la falta de pudor de su novio. Se sonrieron y Liam continuó con su búsqueda.
Rebuscó en su propia maleta y alcanzó unos boxes, unos vaqueros y una ligera camisa. Suficiente. Notó como se le pegaba la camisa a su cuerpo y maldijo por lo bajo no haber usado antes una toalla. Demasiado tarde. Se acercó al espejo. Se miró unos instantes. Frunció el entrecejo. Se despeinó revolviéndose el pelo. Sonrió ante su reflejo satisfecho.
Se acercó a la cama, rodeó con los brazos a Demi colocándose encima de las sábanas.
-Hey baby… Do you wanna come to see the daybreak?-.
-Mmmm… What time is it?-.
-Almost the six-.
-You’re crazy!- se cubrió aún más con las sábanas.
-C’mon!-.
Dio comienzo la guerra de cosquillas. Desgraciadamente no tardó en verse interrumpida cuando unos insistentes golpes en la puerta inundaron la habitación. Ambos se miraron confusos, finalmente Liam se decidió, se levantó algo molesto con el autor de esos ruidos que habían interrumpido una victoria segura.
Alcanzó la puerta y la abrió de golpe. Un hombre uniformado y corpulento apareció tras ésta.
-Buenos días- dijo sarcásticamente el chico, recibiendo una dura mirada de aquel hombre.
-¿Payne, Liam?-.
-Sí-.
-Va a tener que acompañarme-.
-¿Perdón?- dijo incrédulo Liam, sin embargo, no se percibía ningún tipo de nerviosismo o preocupación en su voz.
-Le ruego que me acompañe-.
-¿He ganado algo?- la severa actitud del hombre le indicó que no era momento para bromas- Mire, lo siento pero si no hay algo oficial creo que no estoy obligado a…-.
-Escucha, crío, vengo de la comisaría con órdenes muy precisas de volver allí con Liam Payne. Puedo llegar con éste detrás de mí como un buen chico o con éste siendo arrastrado de los pelos-.
-Woow, tranquilo hombre. ¿No tiene una orden?- el rostro del oficial rallaba la desesperación- No, claro… ¿Para qué?-.
Demi observaba incrédula la escena, se cubrió con las sábanas y se apresuró a buscar su ropa, algo le decía que se avecinaban problemas.
-Esto… Demi… tengo que acompañar a este señor tan agradable a comisaría… volveré… ¿Cuándo volveré, señor policía?-.
-No podría decírselo…-.
-Pues no puede decírmelo- el sarcasmo no era algo propio de Liam, aún así la chica no pudo sonreír ante la falta de calma de él.
-¿Nos vamos?-.
La chica se quedó sola en la habitación confundida, preocupada y con la terrible sensación de que solo una persona la podía ayudar en eso.

5+2

Subía lentamente las escaleras adormecida, pero desperté de golpe cuando Zayn me adelantó subiendo los escalones de tres en tres, no tardé en comprender lo que se proponía. Avancé rápidamente tras él, pero fue demasiado tarde, cerró la puerta del baño tras de sí con pestillo.
-¡Maldito Zayn! ¡Yo soy la primera en la ducha! ¡Lo hemos dicho antes!-.
-Se siente-.
-No me jodas Zayn.- Golpeé furiosa la puerta- Te odio-.
Me había rendido cuando la puerta se abrió de nuevo, asomaba su cabeza y parte del cuello.
-Ok, you can be the first one- hice ademán de entrar, pero me frenó- the problem is... that I'm already naked, so maybe we sould get the shower together-.
Le mire recelosa de que se tratara de otro truco para su victoria.
-Really?-.
Como única respuesta abrió totalmente la puerta e hizo una florida reverencia para que me adentrara. Sonreí, no era un truco.
Su móvil comenzó a sonar. El hecho de que alguien te reclame a esas horas solo puede ser porque alguien te necesita urgentemente o porque algún amigo está borracho y quiere hacértelo saber muy amablemente.
-Ignore it- me sugirió, pero yo no las tenía todas conmigo, salí del baño- Fuck…-.
-I just want to know who’s calling…-.
Realmente esa era mi intención hasta que comprobé que el nombre que relucía en el aparato era el de Demi. Oí el sonido del agua: Zayn había empezado sin mí, maldije a mi amiga antes de llevarme el teléfono al oído.
-¡Hola rubia! ¿Qué haces tú llamando a mi novio?-.
-¿Marina? ¿Qué haces tú con el móvil de Zayn?-.
Ambas comenzamos a hablar a la vez intentando explicarnos, finalmente estallamos en carcajadas.
-Creo que han detenido a Liam- me confesó al final.
-¡¿Quééééé?- empecé a reírme sin poder ni saber parar- ¿Liam? ¿En la cárcel?-.
-Sí, joder, no te rías… ¿Puedo hablar con Zayn?-.
-Mmm...está en la ducha, pero ¡Cuéntame qué ha pasado! ¿Qué pasa, que no puede salir nadie contigo de viaje sin acabar en la cárcel?-.
-En serio, Marina ¿Por qué has tenido que coger tú el teléfono? Es algo serio, ¿Vale? Deja de reírte-.
-Perdón, perdón-.
Zayn no tardó en salir envuelto en una toalla y con una sonrisa en el rostro, me interrogó con la mirada.
-Man, your boyfriend is on trouble…-.
La sonrisa se fue inmediatamente de su rostro y me arrebató el teléfono con preocupación.

5+2

Demi cerró apresurada la cremallera de su bolso, salió de la habitación agitada y cerró la puerta tras de sí. Zayn le había dicho que él se encargaría, pero aun así, sabía que no era infalible, la última vez, cuando ayudó a Marina en Miami, al menos ambos se encontraban en el mismo país, el caso en aquellos momentos no era ni parecido.
Se las arregló para conseguir un taxi que la llevara a la comisaría más cercana. Allí lo encontró, Liam estaba sentado en una silla en una sala abandonada, no parecía haber gente peligrosa por allí, algo que agradeció. Al verla, el chico se levantó de golpe y se acercó a ella.
-¡Demi!-.
-¿Liam, qué está pasando?-.
-Pues aún no me lo han dicho- Le cogió de las manos intentando calmarla- Supongo que será por lo de la moto, la perdí la noche de la pelea y cuando volví a la playa a buscarla ya no estaba-.
-¿Y qué vas a hacer?-.
-Ni idea, no me han dado ni un abogado, aquí nadie me entiende… ¡Eh, tú! ¡Cara-pan!-.
Un agradable hombrecillo de color con aspecto bonachón pasó caminando junto a ellos, portaba varios vasos de plástico con lo que debía ser café, probablemente se trataba de un becario. El hombre frenó en seco y miró a Liam con una sonrisa amigable.
-Puedo pagar la moto ¿Vale? –el hombre no mudó la expresión de su rostro- ¡Por el amor de dios, puedo comprar la empresa entera, si quiero!-.
La sonrisa seguía allí, finalmente, el hombrecillo le alcanzó un vaso a Liam amablemente.
-¡Tócate los cojones!-.
Demi, exasperada ante la falta de tacto de su novio, ella misma aceptó el café que el becario le ofrecía. Le dedicó una sonrisa y al fin los dejó atrás.
-¡¿Pero a ti qué te pasa?!- le espetó Demi.
-¡Llevo casi una hora aquí y nadie se ha dignado a explicarme nada!
-Pero si no has hecho nada, no te va a pasar nada, tranquilízate ¿Quieres?-.
Sus palabras parecieron hacer efecto, ya que el chico se calmó, aun así aun tenía algo qué decir:
-¿Por qué has tardado tanto?-.
-Estaba intentando localizar a Zayn, creo que es el único que podía ayudarte-.
Liam asintió algo confuso.
-Esto apesta…-.
-Ey…- Demi agarró al chico del cuello de la camisa y lo atrajo hacia sí haciendo encajar sus labios perfectamente- no va a… durar… mucho… ¿Vale?-.

5+2

Zayn había desaparecido de mi lado en busca de cobertura suficiente para conseguir una adecuada velocidad de red, la única compañía que me quedaba en mi Australia particular era su blackberry… La noticia de Liam aún me hacía sonreír.
Acudí al encuentro de Zayn, en la terraza parecía completamente sumido en algunos documentos de internet. Le pedí permiso para usar su teléfono, pero ni me contestó, así que la usé de todos modos. Consulté su agenda, Hazza. Ese era el primer contacto que me llamó la atención, comencé la llamada.
-Hey man!-.
-Hello! Zayn?-.
-Nop!-.
-Marina!-.
-Yes!-.
-Wooo you calling me? Is this real life? How’s Spain going?-.
-Haha Spain is fine… but guess what? Liam’s in jail!-.
-Whaaaat? Seriously?-.
-Yeah, Demi just called me!-.
Así comenzó una interminable charla de cotilleos, donde el mal parado de nuestras palabras era Liam y, en un segundo plano, Zayn, quien pagaría la factura.
Tras media hora, mi compañero de piso decidió levantar la vista de su portátil, miró a su alrededor buscando algo, su vista se posó en el aparto que ahora permanecía en mis manos y oídos, solté una carcajada ante un comentario de Harry y me dispuse a contestarle cuando Zayn me arrebató el teléfono muy serio.
-¡Oye! Estaba hablando con Harry-.
-No, estabais haciendo los idiotas-.
Le miré incrédula, tremendamente ofendida.
-Tranquilízate, Zayn-.
-No, es que ya está bien. Meten preso a Liam y lo primero que se te ocurre es llamar a Harry para poneros a hacer bromitas.
-Zayn yo creo que no es nada serio porque…-.
-Déjalo-.
Comenzó una conversación telefónica internacional. Se me llenaron los ojos de lágrimas ante su busca reprimenda  y salí de la casa.

5+2

Demi esperaba intranquila en la destartalada sala de estar de aquella comisaría, miraba con preocupación  hacia la sala por la que había desparecido Liam, más bien, a la sala a la que lo habían arrastrado.
Tras otra media hora más, la puerta finalmente se abrió, un par de policías salieron delante del chico, Demi se acercó con rapidez.
-No es por lo de la moto- dijo sencillamente.
-¿Entonces?-.
-Es por la pelea del otro día-.
-Señorita, no puede hablar con él-.
Haciendo caso omiso, Demi se deshizo de la mano del hombre sobre su hombro de un empujón.
-Tengo que quedarme un rato más, hasta que hablen con el otro y decidan qué es lo que hacen conmigo- el sarcasmo quedaba bastante patente.
-¿Cómo que qué hacen contigo? Si tú no hiciste nada…-.
-Ya, pero al parecer eso no es lo que figura en la denuncia. Escucha, ve al hotel…-.
-¿Qué? ¡No!-.
-Demi, por favor, ves al hotel y llama a Zayn, dile que necesito que me envíe más divisas de este país, dile mi número de cuenta, lo que haga falta ¿Vale?-.
-¿Te van a hacer pagar? No me lo puedo creer-.
-Aún no lo sé, pero por si acaso…-.
-Vale, en un rato vuelvo-.

5+2

Inconscientemente deseaba que me encontrara, por eso mi escondite no estaba demasiado oculto, aunque sí lo suficiente para que tuviera que pasear un rato hasta él. Tomó asiento a mi lado en la playa y me miró profundamente. Perdí, derrota absoluta.
-Lo siento muchísimo, Zayn-.
Sonrió.
-¿Por?-.
-Por lo de antes-.
-¿Qué es lo de antes?-.
-Pues lo de…- comprobé como se carcajeaba internamente, se reía de mí- Quieres que me humille ¿Verdad?-.
-No estaría mal, la verdad-.
-Jamás- Un intento de levantarse fue necesario para que volviera a abrir la boca-Vaaale, lo siento, siento haber hecho bromas con eso, habérmelo tomado tan a la ligera, no haberte ayudado a solucionarlo, haber ascendido tanto la factura de tu teléfono…-.
-¡¿Cómo?! ¿Llamaste tú?-.
-No- dije demasiado tarde y resultó poco creíble – Lo siento ¿Vale?-.
Empezó a reírse y pasó un brazo por mi hombro para acercarme a él.
-Aishhh Marina… Voy a tener que castigarte-.
-¿La humillación no era suficiente?-.
-¿Tú qué crees?-.
-Te odio… A ver, sorpréndeme ¿Qué quieres que haga?-.
-Mmmm… algo se me ocurrirá-.

5+2

Había llamado a Zayn, después a Marina y de nuevo volvía a llamar a Zayn, al parecer nadie contestaba y empezó a exasperarse ¿Qué podían estar haciendo más importante que ayudar a Liam? Cualquier cosa, supuso, tratándose de Marina.
La puerta de la habitación se abrió de golpe, sobresaltando a la chica, vio entrar a Liam maldiciendo. Saludó a su chica con una sonrisa y, al ver que aún tenía el teléfono en la oreja soltó:
-Dale las gracias de mi parte. Zayn, mate, you’re the best!!-.
-He’s not on the phone…-Dijo confundida colgando la segunda llamada a ese número.
-Oh… well I don’t know what he would have done, but it worked-.
-Great!-.
Liam le relató la historia brevemente, ya que tampoco había mucho donde extenderse. Finalmente en alemán agredido apareció en comisaría y habló en una sala aparte con los policías, sin explicación alguna, le comunicaron a Liam instantes después que podía marcharse.
-I still don’t know what happened!-.

5+2

Zayn había tenido la maravillosa idea de castigar a Marina con la obligación de servirle a lo que él pidiera durante una hora, sin poner objeciones y, por cada orden mal obedecida, sumaría cinco minutos al tiempo de servicio. Alcanzaron el apartamento y Zayn se apartó de la puerta depositando las llaves en manos de Marina.
-Ábreme la puerta, por favor-.
La chica obedeció.
-Comprueba mis llamadas-.
La chica obedeció y le comunicó las dos llamadas perdidas de Demi.
-Bien, devuelve la llamada y sujeta el teléfono mientras hablo con ella-.
La chica obedeció.
-Demi, how’s Liam? What?! Already? No I didn’t call anybody… So weird… Demi, seriously, I promise that wasn’t me… Ok. Han soltado a Liam- anunció sorprendido.
-Sí que eres bueno…-.
-¡No he sido yo!-.
-¿Entonces?-.
-Bueno, solo hay otra persona que lo sabía… -.

5+2

Tumbados por fin en la cama, Demi se apoyó en el pecho desnudo de Liam.
-Menudo día…-.
-Sí, ha sido una pérdida de tiempo… Mañana tendremos que recuperar el tiempo perdido-.
-Me parece bien- Le besó dulcemente.
-Solo queda un día- Le devolvió el beso no tan dulcemente.
-No pienses eso…-.
-De acuerdo… futura señora Payne-.
Suspiró agradecida ante la mención de aquel apodo. Se fundieron en un solo ser, como tantas otras veces en aquella semana.

5+2

-¡Marina! Ven un momento por favor-.
Era la tercera vez que me llamaba y solo llevaba diez minutos en su “poder”. Acudí a la terraza con paciencia celestial. La primera vez quería que le hiciese un té, la segunda que le pusiera hielo al té y la tercera:
-Se me ha acabado el té, hazme más, por favor-.
Entre eternas miradas de odio recogí su vaso y salí de la terraza. Volví obedientemente y su móvil empezó a sonar.
-Comprueba quién es…-.
-Es Harry-.
-Muy bien, acércamelo a la oreja… ¡Harry! ¿Qué hay? ¿Marina? No, está castigada, no puede hablar con nadie… No te jodo, colega. Entiendo… aha… ¡Qué grande! Gracias tío, ¿Qué haríamos sin ti? Hahaha desde luego. Vale, hasta luego. Cuelga, Marina. Resulta que la madre de Harry conocía a un tipo en la embajada. Puedes retirarte, esclava-.
-Idiota, no se puede ser más idiota… Rompes el record de los idiotas… ¡Eres el rey en idiotilandia!-.
-Silencio, por favor-.
Obedecí mordiéndome el labio inferior, me arrepentí enseguida de haberme arrepentido ante él.
-¡Marina! Ven, necesito de tus servicios- cómo se cachondeaba el capullo.
-¡¿Qué?!-.
-Quiero jugar con mi Scalextric, prepáramelo, juega conmigo y déjame ganar-.
-¿No te apetece hacer balconing? Te puedo empujar si quieres…-.
-¿Es que no hablo claro?-.
-¿Sabes? ¡Me da igual todo! Paso de tu perdón, te estás pasando…-.
-Te lo diré otra vez antes de sumar cinco minutos más: S-CA-LEX-TRIC-.
Le lancé un cojín para que viera lo que me asustaban a mí sus cinco minutos. Abrió la boca sorprendido y me miró como si acabara de cometer una traición imperdonable, digna de pena de muerte.
-No recuerdo haberte ordenado que me lanzarás un cojín a la cara…-.
-Deberías despedir a tu servicio, no lo hace muy bien…-.
-Solo te diré una cosa: CORRE-.
Eché a correr-.

jueves, 8 de septiembre de 2011

4ever Yours (38) Algún lugar lejos de aquí.


Iban a por el séptimo.
-I’m gonna show you the world…- Liam se incorporó y llamó con la mirada a su chica, que no tardó en hacer lo propio.
-Ni siquiera te das cuenta de cómo me está afectando esto, haces que se aceleren mis pensamientos…- entre sonrisas, la rubia subió y besó al chico con toda la pasión que se habían encargado ya de liberar.
Él la agarró y le dio la vuelta mientras seguía besándola, perdiendo el control de sus labios y su lengua. Aquella lujuria los condujo a ambos hasta la puerta, donde consiguieron que un estruendoso golpe los frenara en seco.
-All I need is to feel you…- al oír aquello entre los suspiros de su chica, la agarró todavía más fuerte contra la puerta y empezó a acariciarla. Sus manos se juntaron a la altura de la cabeza, sus labios se separaron y él siguió mordiendo el cuello de la chica consiguiendo que gimiera y gritara su nombre de placer.
-Yo soy tu hombre…eres lo primero para mí, y voy a llevarte muy lejos…-.
-Entonces ven a por mí…hazlo antes de que me vuelva loca…- Demi se separó del chico y lo observó con su mirada periférica; con una media sonrisa dibujada en su cara y el deseo reflejado en su mirada, no tardó en volver a cogerla; esta vez la tiró a la cama, dónde ella lo volvió a tener de frente.
-You’re perfect…- el chico se iba agachando y acercando a la chica mientras esta retrocedía divertida por la cama- your body is my desire, look how good you look…-.
-Ya no tengo sitio donde esconderme…- tras las pícaras palabras, el chico finalmente se posó sobre ella y comenzó a atraparla con sus besos de nuevo, besos que recorrieron todo el cuerpo de la chica.
-Un roce de tu piel…es lo único que me hace falta-.
-Reach out and touch me…- haría mucho más que eso.


5+2

La invadieron sensaciones que jamás había experimentado, ni siquiera por Louis. Aquel  chico que estaba frente a ella le había dado más de lo que ella podía llegar a imaginar; se daba cuenta de lo afortunada que era.
El juego había cambiado, ya no se sentía vulnerable cuando el chico la hacía caer, ahora estaban construyendo algo, y era agradable saber que él estaría ahí para cogerla, y que compartían ese sentimiento.
Mientras Zayn estaba, muy a su pesar, despidiendo a Kingzayn en la puerta, Marina aprovechó para hacer una llamada.
-Hi honey, How are you?-.
-Fine! What about you?- respondió la persona al otro lado de la línea.
-Cool, we are great thank you… by the way… Can you do me a favor? It’s important…for me- se oyeron unas risas al otro lado del teléfono.
-Sure! What are you thinking?-.
-Listen…- la chica explicó paso a paso su plan, incidiendo especialmente en los detalles, todo tenía que salir bien- ¿Te pondrás a ello?-.
-¡En seguida!-.
- Ahora te mando el paquete por un mensajero- Marina vio entrar a su novio a la habitación, solo una sonrisa pudo inundar su rostro- Vale, pues te dejo, un beso cielo, ¡Te quiero!-.
La chica volvió a echar un vistazo a la habitación, y su sonrisa se hizo aún más imponente, no se lo terminaba de creer.
-Te robaría esa sonrisa y la guardaría para siempre…- el chico se acercó a ella pero antes de que pudiera sentarse a su lado, el móvil le sonó en el bolsillo; muy a su pesar, la chica rió divertida.

5+2

Dejé la habitación con Liam plácidamente dormido. Ahora era hora de otro tipo de placer, un placer no comparable, pero también terriblemente agradable.
Me dirigí junto con mi placer culpable, el capuccino, a la recepción del hotel, dónde pedí encarecidamente un ordenador con conexión a internet; mi móvil no tenía cobertura (y por tanto tampoco internet) y necesitaba comprobar que no me necesitaban en el trabajo ni nada parecido.
El encargado me llevó a una sala llena de ordenadores y me acompañó hasta el que estaba junto a la ventana, lo encendió, y tras comprobar que funcionaba se marchó de nuevo a la recepción.
Dejé a mi lado el delicioso café y comprobé el correo. Tenía publicidad, como siempre, pero también había recibido un par de correos de Andy, en uno acababa comentándome las asombrosas críticas que había recibido el desfile, y me notificaba que me llamaría durante la semana que viene; en el otro, hablaba sobre un trabajo de modelo…no quise darle demasiada importancia a eso, ya lo contemplaría luego.
Di por concluida mi sesión con el correo e iniciada mi sesión con el cotilleo. No podía faltar twitter en un día con internet. Respondí algunos tweets y comenté como estaban yendo mis vacaciones (no di detalles por supuesto) en “algún sitio lejos de aquí”. Los chicos también habían twitteado hacía poco:
“Havin’ fun with family in a reunion” twiteó Harry, “Havin’ fun with vibes, viva Espana” había dicho Louis; “Makin dark plans for today, it will be so funny” el tweet de Niall me dejó con ganas de saber más, pero no había dado ningún otro tipo de detalle. Ni rastro de Marina o Zayn por twitter; o se lo estaban pasando muy bien, o se habían acabado matando el uno al otro.
-Eh!- fui a coger el vaso con el capuccino pero no estaba donde lo había dejado; ahora lo sostenía mi alto y atractivo novio.
-I was thirsty- me dijo como única respuesta, añadiéndole una sonrisa pícara y un guiño de ojo.
Intentaba que mi respiración volviera a la normalidad después de toda aquella locura, verlo ahora seguía trasportándome a otro lugar, a “algún sitio lejos de aquí”. Ya no volvería a verlo con los mismo ojos jamás, aquel Liam Payne que estaba de pie junto a mí se había trasformado.
Por primera vez reparé en las magulladuras que consiguió hacerse la noche anterior; yo no podría sonreír como él lo hacía teniendo semejantes heridas, pero a él no parecía importarle lo más mínimo.
-Are you Ok? It seems that hurts…-.
-Me? Oh! I’m absolutely fine, but I’ll be better when you have back in my arms- lo mire atónita, aún quería más. Le arrebaté mi café de las manos con una sonrisa y me levanté para saludarlo como era debido.
-Hoy me toca a mí; tendrás que esperar a ver todas las sorpresas que te esperan…- lo cogí de la mano invitándolo a acompañarme a la habitación.

5+2

-Yeah?... Niall! How’s going mate?...yeah, yeah, I know, we promised…Ok…no problem man- Zayn miró a Marina, ambos esperaban divertidos a poder entablar una conversación propia- We’ll be there in half an hour ok? See ya!-.
-¡Que entusiasta!-.
-¡Sí! ¿Qué me dices, te apetece ir a visitar a Niall?-.
-Ah, ¿Pero tenemos opción?- la chica seguía riéndose-¡Vamos a ver a nuestro rubio favorito!- Zayn le echó una mirada aguda y penetrante, pero no pudo mantenerla demasiado y también se echó a reir.

5+2

-¡Danny!- por fin lo encontraba.
-¡Demi! Te estaba buscando, ¿Estás bien? ¿Está tu amigo bien? Ayer os perdí de vista y…-.
-No te sientas mal, estamos bien, está un poco magullado pero eso no le impide hacer vida normal- no sabía si normal había sido la palabra adecuada para describir su comportamiento- ¡Escucha! ¿Verdad que me harías un favor? Yo también me siento un poco mal y…me gustaría hacer algo-.
-Claro, dispara-.
-Necesito que me acompañes a un sitio, y que me dejes eso que me dijiste que te habías traído-.

5+2

El taxi los dejó a un par de calles. En el ambiente se respiraba el peligro, lo notaban, algo estaba a punto de pasar. Siguieron andando ya que nada les daba indicios de que debieran parar; graso error.
Tras el silencio se sucedió la tempestad. De un lado, Niall apareció gritando con dos grandes pistolas de agua que los empaparon al instante; del otro lado, Aiden repetía la operación del irlandés con otras dos pistolas iguales.
-¡Rápido Marina!-.
-¡Zayn!-.
Ambos atendieron a la llamada, dividiéndose divertidos en dos diferentes bandos, enfrentados por la soberanía del lugar. A un lado, Marina compartía filas con Niall, mientras que al lado contrario, Zayn le arrebataba una pistola a Aiden y se unía a él.
-Está bien, escucha, su punto débil es el cuello. Lo lleva protegido por una especie de bufanda, pero si conseguimos penetrarla, serán historia- Escondida tras un muro, Marina asentía alucinada a las palabras de su amigo.
-De acuerdo, cúbreme mientras intento idear un plan de ataque- la chica se metió instantáneamente en el papel.
Salió de su escondrijo. Solo encontró a Zayn, con el arma bajada y mirándola fijamente.
-No me dispararías…estoy desarmado-.
-Yo…- la chica lo miró y se lo pensó. Ya no iba decidida a por todas, dudaba sobre si debía disparar o no.
-¡Ahora!- gritó su novio, lo que hizo que Marina adoptara una postura defensiva y disparara a todos lados.
-¡Niall!- el rubio salió a escena y defendió a la chica hasta que acabó con Zayn; estaba fuera. Solo faltaba Aiden- De acuerdo, ahora la única táctica posible es el ataque frontal- dijo de nuevo tras el muro, preparada para el ataque.
-…A por ello- no cabía la piedad en los ojos del irlandés.

5+2

Descansaban ya secos dentro de la casa de la familia irlandesa; los cuatro estaban agotados tras varias rondas de batallas, batallas que acabaron con la supremacía del equipo de Niall.
-¡No es justo!-.
-¡Si lo es! Hemos ganado con todas las de la ley, el mapa nos pertenece-Niall agitaba en su mano un trozo de pergamino enrollado concienzudamente.
-Así que por eso luchabais…- dijo Marina sonriendo a Niall.
-Sí…- el chico miró de arriba abajo a sus compañeros derrotados y luego a Marina- Está bien…supongo que podéis buscar el tesoro con nosotros-.
-¡Un tesoro!- dijo Zayn entusiasta- … ¿Un tesoro?-.
-Sí, suelo hacer cosas así cuando vengo de vacaciones aquí. Hoy he comentado que veníais y… ¡Adoro a mi madre!- Niall guiñó el ojo, cómplice.
-Yo he venido a grabar aquí, y me he encontrado con esto…es mucho mejor que una hamaca en la playa- añadió Aiden.
-¿Qué opinas Zayn?- preguntó curiosa Marina.
-Opino que… ¡Ese tesoro va a ser mío! ¿Qué hay que hacer?-.

5+2

Si la encontraba, ella sería su recompensa, así lo decía la nota, y así lo haría.
Nada más salir a las puertas del hotel, se encontró dos camisetas idénticas, cada una apuntando a uno de los caminos elegibles desde allí. Una sería de Demi, ¿Pero cuál? No podía equivocarse nada más empezar. Cogió ambas camisetas y la respuesta se presentó ante él. Una de ellas era normal, sin nada especial, pero la otra desprendía el perfume que caracterizaba a su novia. Siguió el camino de la derecha.
Siguió  la senda hasta llegar al chiringuito de la piscina. Del techo de paja colgaban dos pendientes idénticos, salvo por que uno de ellos era dorado, y el otro plateado; demasiado fácil. Demi prefería la plata, nunca llevaba oro; siguió hacia delante entonces.
Llegó a un puente, y tras cruzarlo se encontró con la siguiente prueba. Colgado de un poste del puente, un atrapasueños; en el otro lado, un colgante en forma de búho.
-Piensa, piensa, piensa…- esta era difícil.
Demi no era para nada alguien que vivía de noche, así que no podía ser el búho, pero tampoco estaba seguro de que fuera el atrapasueños; podría ser una trampa. Finalmente y tras mucho pensar, se dejó guiar por la intuición y eligió al búho, le pareció estéticamente más bonito. De nuevo eligió el camino de la derecha.
Debió acertar, porque ante él encontró un mapa y una brújula. En el mapa, habían dibujadas unas coordenadas, y una carita sonriente que lo hizo sonreír; la brújula lo ayudaría a encontrar el camino, a tiempo.

5+2

“Averigua la palabra correcta para conseguir la primera de tres”
-¿Y eso que coño significa?- preguntó Marina.
-Tenemos que adivinar el acertijo, eso nos llevará al siguiente punto del mapa y a la siguiente pista- Niall conocía el procedimiento.
-Ah…-.
-Pone mi nombre- observó Zayn en el sobre que habían encontrado- Veamos de que se trata…-.
El chico lo abrió curiosamente y encontró lo siguiente:
“Durante este acertijo la encontrarás,
Aquella palabra que debes hallar,
Nunca jamás lo pudiste soportar,
Cansándote hasta cuando lo oías nombrar;
Encuentra la palabra y podrás pasar”
-¿Y qué tengo que hacer con esto?-.
-Pensar Zayn… ¿Qué palabra puede ser?- Marina lo animó a estrujarse los sesos…- Tiene que ver contigo, eso está claro-.
-Sí…-.
-Algo que odio y que está aquí…- todos se pusieron a pensar a conciencia.
-Yo no soy bueno en esto, así que os lo dejo a  vosotros- admitió Aiden.
-¡Ya está!- todos dieron un salto, Niall incluso profirió un pequeño gritito- ¡Ya lo tengo! Algo que odio, o al menos lo hacía… que está aquí escrito… mirad la primera letra de cada línea- Zayn paseó orgulloso la pista ante sus compañeros.
-Dance! ¡Es verdad!- recordaron todos-Es… ¡Correcto!-Niall miró orgulloso al grupo- Y la palabra secreta es…Campo-.
-¿Dónde tenemos que buscar la siguiente?- Zayn le estaba cogiendo gustillo a esto de encontrar el tesoro; Marina lo observaba divertida mientras también ella jugaba.
-La siguiente… tenemos que ir al cartel gigantesco de marisco, no está lejos de aquí-.
Los cuatro se pusieron en marcha, y en menos de diez minutos se encontraban junto al famoso cartel. Estaban allí, ahora tenían que encontrar el lugar dónde estaba oculta la pista que les daría la pista para hallar la siguiente pista. Estaba hecho a conciencia.
-Ve a buscar por el aparcamiento, yo buscaré por los alrededores del cartel- dijo Marina a Zayn.
-Nosotros vamos a mirar dentro del local, todo podría ser…- dicho aquello ambos se aventuraron al interior del restaurante.
-¡¿Ves algo?!- preguntó la chica.
-¡Nada de momento!- No solo buscaba por el suelo, metía la cabeza bajo cada coche, buscando hasta detrás de las ruedas.
-¡Espera Espera, tengo algo!- la chica encontró la siguiente carta.
-You’re the best!- su novio la abrazó y le robó un apasionado beso al más puro estilo pirata, carcajada incluida.
Ambos llamaron al resto del grupo para que todos se reunieran en el aparcamiento. Marina tomó la nota y la abrió para leerla.
- Como título dice: Una fácil- Marina siguió leyendo y encontró la pregunta:
“¿Dónde gastaría Niall toda su paga?”
-¡Música!-se adelantó Aiden.
-Nando’s!- gritaron Marina y Zayn a la vez.
-Tiene que ser Nando’s- razonó Marina- ¿Qué es lo que más adora Niall? ¡La comida! ¿Qué comida le gusta más? ¡La de Nando’s! … ¿Me equivoco?-.
-Pregúntaselo al sobre, diga lo que diga yo es él el que tiene que darnos la respuesta…- concluyó Niall- aunque yo te daría la razón-.
-Ya…-.
Al parecer, Marina dio en el clavo. La siguiente palabra era “de” y el siguiente sitio al que ir, la playa.

5+2

Se le acababa el tiempo. La nota decía claramente “antes de las 19.0” y eso sería dentro de cinco minutos.
-What have I done?- ¿Habría elegido el camino incorrecto? Pese a que ese temor se apoderaba cada vez más de él, siguió hacia delante.
Casi al instante distinguió una cala. Se adentró en aquel paraíso dónde el sol ya estaba a punto de esconderse. Eso sería. Demi lo había dispuesto todo para que no se perdieran el atardecer. Pensaba comérsela a besos en cuanto diera con ella.
No  mucho más lejos de dónde se encontraba, distinguió una especie de toalla puesta uniformemente sobre la arena, y también una sábana se encargaba de cubrir algo alargado y alto.
-You have reached time; and you have chosen the right way- sin darle tiempo a girar, una encantadora rubia se abalanzó sobre él regalándole un profundo abrazo.
-¿El atardecer? Muy romántico señorita…-él la tumbó en la manta y la miró a los ojos; la conexión fue inmediata.
-No es solo eso… tengo en mente algo más- la chica se rindió a sus besos y a sus caricias al tiempo que dejaba, todavía, cosas a la imaginación.
-Y… ¿Tiene que ver conmigo?-.
-Contigo… y con todo el universo en general-.
Se recostaron el uno junto al otro, cogidos de la mano contemplando el más romántico de los atardeceres.

5+2

-¿Cómo vamos a encontrar algo aquí?- Aiden era el sensato, pero eso le restaba gracia al juego.
-Ese castillo de allí parece bastante sospechoso…-Niall apuntó a un… muy enorme castillo de arena, que tenían a un par de metros frente a sus narices. Al rubio no le faltaba razón; era muy sospechoso.
-Y… ¿Ahora qué hacemos?- preguntó Zayn. A todos se les pasaba la misma idea por la cabeza, pero nadie se atrevía a decirlo; el castillo estaba demasiado logrado y daba pena acabar con él.
-¡Destrocémoslo!- dijo al fin Marina.
-Yo no podría…- susurró Niall- pero si la pierna se me escapa así sin querer…- la torre norte cayó- o el brazo sin poder evitarlo…- adiós a todo el panteón principal.
-Yo podría tirar a Marina sin querer…- Zayn intentó empujar a Marina hacia el ya derruido castillo, pero fue más rápida que él y logró escapar de las manos del chico.
-Marina puede tropezarse solita, Demi se cae todo el tiempo, no es muy complicado imitarla- dicho aquello se tiró y destrozó el resto del castillo, lo que el resto aprovechó entre risas para buscar algún sobre o semejante.
Por mucho que buscaran, nada, ni rastro de la pista. Pero cuando ya iban a darse por vencidos, vieron justo al lado de lo que había sido una obra maestra en arena, una torrecita mucho más modesta que les había pasado desapercibida.
-¡Mía!- Marina se lazó al mismo tiempo que Zayn, lo que les provocó a los dos un chichón en la cabeza, y la demolición de dicha torrecita.
-¡Aquí está cabezón!- le dijo Marina a su novio entre divertida y dolida.
-No, léela tú, y…perdona- Zayn obsequió a su chica con un beso en la frente. Aquello la reconfortó y la hizo reír.
-Veamos…:
“Todo un detalle haber destrozado una obra de arte con arena, muy inteligente”
Todos se quedaron alucinados, pero tras el shock Marina siguió leyendo con la mirada hasta que encontró el acertijo:
Tienes una cerca que amas,
Y otra allí que ignoras,
La segunda se encuentra donde vive el chico del gran pelo,
Y es esa la que a la respuesta te acerca”
-El chico del que habla es Justin- se apresuró Niall.
-No hay duda- confirmó Marina.
-Vaya, como os lo sabéis…-.
-No te piques Zayn, tú has acertado la primera…-.
-Y acertaré está- los tres amigos se miraron y rieron, pero Zayn cogió la nota y empezó a pensar.
-Ni idea…-.
-¿Qué puede ser?-.
-Ya lo tengo- dijo Zayn al instante- pero os dejo que lo penséis un poco más-.
-¡Anda! No seas malo, ¡Dínoslo! Aunque es imposible que entre Niall y yo no la hayamos sacado…- su novio la fulminó con la mirada- vale…puede que tú la hayas acertado…suéltalo anda-.
-Vale… Canadá, es Canadá, que casualmente tiene una ciudad llamada Londres, como nosotros- la sonrisa de satisfacción pronosticaba una importante subida del ego.
-Smart boy- le confesó Marina dándole un dulce pico al chico.
-¿Cuál es la palabra que hemos conseguido? ¿Dónde está el tesoro?-.
-“Golf”-.
-Campo de golf-.

5+2

-Ha sido…el atardecer más perfecto que jamás he visto- tenía a Liam a punto de caramelo; como también me encontraba yo tras haber experimentado sensaciones que no hubieran sido posibles con el ruido de la ciudad y la gente; solo con las maravillosas vistas que nos proporcionaban este maravilloso lugar nos encontrábamos ante un anochecer perfecto. Mágico.
-Te quiero, Desconocido-barra-Liam Payne-barra- el amor de mi vida- me recosté aún más sobre su pecho y pude oír sus latidos acelerándose, lo que me provocó una sonrisa y un golpe de adrenalina- Por cierto, cómo…antes…¿Cómo has encontrado el camino?-.
-Se mucho más de ti de lo que crees; sabemos mucho más de lo que pensamos el uno del otro, apuesto a que tú también me hubieras encontrado a mí…-.
-Sí, supongo que tienes razón…nos conocemos bien… ¡Aunque yo no hubiera apurado tanto el tiempo!-.
-Me lo he tomado con calma- dijo sobradamente con una sonrisa en su comisura.
-¿Sí? Está bien… me tomaré también  yo las cosas con calma-.
-¡No! Te pido que no me tortures…- rocé mis labios con la mejilla de Liam.
-Una pregunta… ¿De dónde has sacado a este nuevo Liam? Te aseguro que no conocía esta faceta-.
-Tú dijiste que estabas eróticamente cargada, y bueno…  a mí tampoco me disgusta esto, no me quejo la verdad- sendas sonrisas de dibujaron en nuestras caras- Supongo que este Liam estaba ahí, pero nunca había tenido oportunidad de salir-.
-Pues hazme un favor, pídele que no se vaya muy lejos-.
-Se lo comentaré…- picaronamente Liam se echó sobre mí llenándome de “carga sexual” y es que sus movimientos sugerían lo contento que estaba, a lo que yo me uní inmediatamente tras un par de arrumacos.
-¡Espera! –dije separándolo un poco de mí- Yo aún tengo algo que enseñarte- me levanté dispuesta a desvelar que se ocultaba tras la capa.

5+2

En teoría, alguna señal les indicaría a dónde tenían que ir en aquel inmenso campo de Golf.
Ya solo quedaban tres, ya que Aiden había recibido una llamada urgente del estudio y se vio obligado a abandonar la misión. Se habían agenciado un carrito de golf y andaban buscando por todos los rincones.
Algo les hizo redirigir su rumbo.
-Fijaos, esa banderita es de un color diferente al resto…- Zayn conducía; no tardaron más de dos minutos en llegar a dicha banderita.
Cuando se establecieron cuidadosamente en el terreno, vieron una última nota junto a un par de palas.
-Dios, esto se parece a pretty Little liars… como ahora nos empiecen a llegar mensajes al móvil…-.
“cavad”
-Lo que yo decía…-.
-Hagámosle caso- Zayn fue el primero en coger una pala, y le lanzó la segunda a Niall. Ambos se pusieron a la tarea.

5+2

-¿Un telescopio?-.
-Tú mira, ¿Quieres? Y no lo muevas, Danny lo ha dejado justo para…-.
-¿El de la piscina?-.
-Liam! Él me ha ayudado a montar todo esto…-.
-Ok- dijo el chico al fin vencido por la curiosidad.
-Y toma esto…- Demi le entregó una hoja enrollada que parecía oficial.
-Veo… ¡Es muy brillante!-.
-Es…es tuya; se llama Diam, es un regalo que…bueno, lo sé… no se me ha ocurrido nada mejor pero…simboliza todo lo que te quiero, que estamos por encima del universo y…- Liam no la dejó acabar, se abalanzó sobre ella y la dejó atrapada entre la arena y sus besos.
-Eres genial, única, muchas gracias por esto…-.
Los besos, las risas, el amor y el cariño se mezclaron para crear una escena imposible de olvidar. El chico sujetó suavemente los brazos de su chica mientras la besaba y hacía lo que quería con ella. Demi no se quedó atrás y jugueteó con los labios del chico, hasta que se cansó y pasó a la espalda, y más tarde al pecho, fusionándose de tal manera que ambos compartían un solo cuerpo.
-I love you…- Ninguno podía parar de sonreír mientras seguían abrazados al amparo de sus estrellas.
Como si de una estrella fugaz se tratara, aquel momento traspasó el corazón de Liam, quién se dejó llevar.
-Cásate conmigo-.
-¡¿Qué?!-.
-Cásate conmigo-.

5+2

-Aquí fue donde nos besamos delante de todos por primera vez-.
-… ¿Te acuerdas?- eso no se lo esperaba.
-No podría olvidarlo…-con la pala, notó algo duro- Aquí está, Niall, ayúdame a sacarlo-.
Con la fuerza de los chicos, y una pequeña ayuda de Marina, consiguieron sacar el cofre sin mayor esfuerzo, un cofre que bien podría haber sido parte de un botín pirata.
Marina sonrió a Niall, quién le guiñó un ojo a la chica, entre los dos lo habían conseguido.
-I can’t…- Zayn había abierto el cofre- ¿Esto no ha sido idea de tu madre verdad Niall?-.
-Pues…-.
-Culpable- admitió Marina- Yo quería hacer algo por…-.
Zayn ahogó las palabras de Marina con un beso que contenía toda la pasión de estos últimos días, todo ese cariño que acumulaban incesantemente el uno por el otro; hasta tal punto que ambos vieron correr una lágrima por la mejilla del otro.
Había hecho todo aquello por él, había llamado a Niall para que la ayudara a poner un Scalextric del año 1998 en el sitio donde por primera vez habían reconocido lo que sentían el uno por el otro; el juego de los piratas era simplemente un aliciente, algo con lo que conseguir verlo sonreír hasta llegar al final.

martes, 6 de septiembre de 2011

4ever Yours (37) Kingzayn.


-No sabía que supieras cocinar…-.
-No sabías, ni sabes, muchas cosas-.
-¿Y sabré?-.
-Puede-.
-¿Si..?-.
-Si te portas bien-.
Las cosas estaban dando la vuelta, antes había sido yo la que había usado esa misma expresión ¿Iba ganando Zayn? No, íbamos empate, pero si me dejaba engatusar con sus trucos de cocina acabaríamos de nuevo y como siempre, haciendo lo que él quisiera.
-Pues lo mismo te digo-.
-Oh, pero yo sí sé muchas cosas de ti-.
-Eso es lo que tú te crees-.
-La diferencia es que yo tengo a Demi de espía y tú no tienes a nadie-.
-¿Cómo que no? ¿Qué hay de los demás? Apuesto lo que quieras a que Harry y Louis me dirían lo que quisiera saber-.
-Desde luego que lo harían, pero me he asegurado de que sepan lo mismo que tú-.
-Así que me estás diciendo que hay un Zayn que nadie conoce… Como ¿Una doble personalidad?-.
-Más o menos…-.
Jamás me lo habría imaginado, definitivamente, aquel era un golpe definitivo, tendría que portarme yo bien.

5+2

La Polinesia Francesa era sin duda una de las tierras más vírgenes jamás visitadas, aprovecharon para hacer algo de turismo el primer día y después acudieron a descansar al hotel. Liam ni siquiera parecía Liam, su seriedad desaparecía por momentos, sonaba su móvil y fingía no oírlo, tomaba la carta del menú y pedía sin mirar los precios, sus preocupaciones se iban centrado solo en una cosa, en hacer disfrutar de aquel maravilloso tiempo a Demi; era la única obligación que se impuso para aquella semana.
De nuevo volvían a jugar a aquel juego de desconocidos, se encontraban en la piscina del hotel, Liam hacía largos incansables de un extremo a otro de la piscina, en ocasiones descansaba escasos segundos el borde para observar el paisaje a su alrededor; descubrió unas piernas blanquísimas que se escondían en la protección de la sombra de una sombrilla de paja, la propietaria leía con despreocupación una revista y bebía una piña colada sin percatarse de quién había a su alrededor. El chico reanudó su marcha y se posó esta vez en el bordillo justo enfrente de aquella chica. Le chistó.

5+2

Demi bajó su revista para encontrarse con la mirada color caramelo del chico que le había chistado. La observaba desde la piscina con los brazos apoyados en el bordillo y sonriendo, correspondió a la sonrisa.
-¿Me pides uno de esos?- señaló con la cabeza al vaso de la chica.
Inmediatamente, Demi volvió a su revista.
-Pídetelo tú-.
-¿Qué te cuesta? Estás al lado del bar…-.
-Tiempo, me cuesta tiempo-.
El chico se iba a dar por vencido y, justo cuando estaba a punto de sumergirse de nuevo para seguir con su sesión acuática, Demi preguntó:
-Suponiendo que te lo pidiera… ¿Qué gano yo?-.
El chico lo pensó unos instantes.
-¿Qué quieres ganar?-.
Demi sonrió levemente y se levantó por fin de la paradisíaca hamaca, se dirigió con seguridad al bar y pidió un tornado, no era ni de lejos lo que ella estaba bebiendo, pero sería graciosa la reacción de aquel chico al probar la famosa bebida.
Acudió de nuevo al borde de la piscina y esperó pacientemente a que el chico terminara aquella carrera. Observó cautelosamente cómo flexionaba los brazos en cada brazada, marcando profundamente los músculos de su espalda bronceada, se descubrió a sí misma avanzando lentamente hasta llegar a la comisura del bañador, era un bañador de Billabong algo largo, pero definía la cintura de aquel cuerpo perfecto de manera excepcional.
El chico salió a la superficie y la presencia de la embobada chica le desató una sonrisa, le extendió el vaso. Bebió un pequeño sorbo que le hizo abrir mucho los ojos y le impulsó para atrás.
-¿Qué coño es esto?-.
-Lo que me has pedido-.
-¡¿Estás bebiendo esto?!- Liam salió de la piscina preocupado, y algo enfadado con Demi- no puedes beber esto-.
La chica no aguantaba más y se echó a reír.
-No era eso lo que estaba bebiendo yo. No aguantas ni un segundo de juego, desconocido-.
-Genial- susurró él derrotado- Eres mala… y me voy a vengar-.
-Te espero en mi hamaca-.

5+2

Zayn y Marina se habían tumbado en la parte delantera del yate, mientras éste era conducido por el propietario a quien Zayn le había alquilado aquel paseo.
-¿En serio no sabes conducir esto?- se burló la chica.
-Pues claro que sé- ¿Orgullo o verdad?
-¿Entonces?-.
-¿Qué querías? ¿Qué estuviera ahí dentro mientras tú disfrutabas de esto?-.
La chica miró a su alrededor, solo se veía mar y cielo, y todo tan oscuro que era incapaz de decir donde se fundían esos dos elementos, parecía todo uno. Aparte de sus voces y el ruido del motor, solo el agradable y monótono sonido del agua les hacía compañía.
-Puede que ahora nos esté viendo- dijo la chica en referencia al “capitán”.
-¿Puede? NOS está viendo- se río- ¿Qué pasa, te molesta?-.
-Mmm, no, me siento más segura, así sé que no abusarás de mí-.
Soltó una carcajada.
-Ya te gustaría- ambos rieron.
Luego era el turno de palabra del silencio, se extendió sobre ellos convenciéndolos con su palabra irrevocable y su charla infinita, finalmente, Zayn le arrebató el turno de palabra.
-¿Y si hacemos un Q&A?-Sorprendida con la idea, la chica asintió entusiasmada- Pero podemos preguntar cualquier cosa ¿Eh? Y no se vale evitar ninguna pregunta… Ni mentir, claro está-.
-¿Acaso quieres que me eche ahora para atrás? Venga, pregunta-.
-¿Favorito de One Direction?-.
-¡Tú!- le miró confundida ante la facilidad de la pregunta, el chico sonrió cómplice.
-No mientas…-.
-¡Pero si es verdad! ¿Quién si no?-.
-¿Favorito de One Direction?-.
-Y dale…-.
-¿Es Harry? Suele ser Harry, tiene un no sé qué…-.
-Que no-.
-No será Liam… Venga ¡Dímelo!-.
-Eres tú, bobo-.
-No me lo creo ¿Favorito de One Direction?-.
-Niall-.
-¡Ja!- se incorporó apoyándose en los codos y señaló acusador a la chica- lo sabía- volvió a tumbarse tras un codazo.
-Me toca- dijo dispuesta a una venganza, sin embargo, a la hora de la verdad, le pareció mucho más práctico preguntar:- ¿Qué te gustaría que te regalaran las Navidades del 2011?-.
Soltó una carcajada.
-Así no tienes que calentarte la cabeza ¿No?- Marina se encogió de hombros, no era culpa suya que supiera aprovechar las ocasiones- Pues, te digo, que a día 25 de diciembre de 2011, a las 9:00 de la mañana (ese día se madruga) espero recibir bajo el árbol las llaves de mi nuevo deportivo-.
-¿Un deportivo?-.
-Así es-.
-¿Es lo que más ilusión te hace del mundo?-.
El chico lo pensó unos instantes-.
-Mmmm, ¿Sabes? De pequeño lo que más quería era tener un Scalectrix, pero mis padres no podían comprármelo, luego empecé a pasar de esas cosas, pero creo que me gustaría tener uno para conducir la réplica del deportivo que piensas regalarme por Navidad en él-.
-Te lo montas bien ¿Eh?-.
-Claro-.
-Yo siempre quise tener un perro y mis padres tampoco me lo compraron nunca…-.
-Ohhh… ¡Pobre Marina! Sin perro en su infancia, normal que seas así de mala con las personas ahora, no practicaste en su día con tu fiel compañero-perruno-.
-¡Vete a la mierda¡ ¡Qué borde!-.
-Me toca… Si te casaras, -mirada asesina- obviamente no conmigo, pero si lo hicieras…-.
-¿En el caso de que encontrara a alguien más guapo, más listo, más sensible, más..?-.
-O que te lo propusiera Niall- intentó picar con escaso éxito- Na, es imposible, no hay nadie más guapo ni más listo, te tendrás que conformar conmigo-.
-Termina la pregunta, por favor-.
-Bien, en ese hipotético caso, ¿Dónde elegirías la luna de miel?-.
-New Zealand- dijo con impresionante rapidez para no haberlo pensado nunca antes- Autralia en general, tengo que apadrinar un koala-.

5+2

La venganza del chico tendría que esperar,  Demi sintió una punzada de incredulidad cuando lo vio desaparecer de la piscina sin haber propiciado ni una pista de lo que sería su venganza.
Algo desconcertada y, por qué no admitirlo, insegura, abandonó también la veraniega estampa que le acompañaba donde fuera. Se introdujo en su habitación sin apreciar ningún cambio en ella, nadie había entrado antes que ella. Curiosa como nadie, de nuevo intentó buscar aquella mirada de caramelo por el complejo hotelero, pero no hubo suerte, sin embargo, sí que se encontró con la mirada aguamarina de Danny.
-¿También coincidimos aquí?- saludó la chica.
-¿Te hospedas aquí?-.
-Sí-.
-¿Tú sola?- parecía confundido.
-¡No! Mi compañero solo está… -lo pensó sin llegar a ninguna conclusión- desaparecido-.
-Yo estoy en plan familiar, con mis primos alemanes y mi hermana…-.
-Espero verte más por aquí- dijo como despedida-.
-Estaré esta noche en la fiesta del chiringuito de la playa-.
Demi asintió con una amplia sonrisa, ni siquiera sabía que había una fiesta en la playa aquella noche. ¿Debería ir? Quizá si conseguía un acompañante digno…
Sus recuerdos revivieron  el momento de la piscina, la flexión de su espalda al dar cada brazada… sí, definitivamente aquel chico sería digno. ¿Pero dónde se había metido? ¿Acaso aquella era su venganza? Desaparecer no era muy maduro, ni tampoco muy de su estilo.
Por supuesto, su presencia no tardó en hacerse notar, de una manera un tanto escandalosa tratándose de aquel personaje. Demi caminaba con tranquilidad por el camino central de la isla, cuando algún tipo de vehículo pasó a toda velocidad por su lado, revolviendo su pelo y agitando la falda de su precioso vestido ibicenco.
-¡Ey!- gritó ella, atusándose la falda, sin prestar atención a la imponente Harley que se paró enfrente de ella.
Finalmente levantó la vista y se apartó el pelo del rostro, mechones revolucionados sin duda alguna como resultado de la excesiva velocidad de aquella moto. Volvía a estar ahí, el chico la miraba con cuidado, sostenía aquella pesada moto con el simple apoyo de la pierna derecha. Las clásicas adidas daban paso a unos ajustados vaqueros que ascendían sujetando  firmemente la motocicleta. Por último, una sencilla camiseta negra terminaba por cubrir el cuerpo del motorista, no era necesario imaginar los trabajados abdominales, ya que el algodón de aquella camiseta hacía ese trabajo por ti, modelando el pecho del chico hasta los brazos, donde el algodón dejaba de existir, evitando así ocultar unos musculados brazos que se apoyaban en volante de aquella moto con despreocupación, pero tentadoramente tensados y bronceados. En sus ojos, unas Ray-Ban wayfarer negras, en sus labios, una media sonrisa, en su rostro en general, un leve rubor como resultado de aquel sol paradisíaco que en breves se convertiría en bronceado. Su pelo se agitaba con la brisa marítima que parecía recorrer toda la isla, si ese pelo había sido peinado antes, su dueño no había hecho muy buen trabajo con él, de hecho el efecto perjudicial del sol se entreveía en él, pelo de textura de paja y aclarado ascendiente.
-Wow…- alcanzó a decir.
-Lo siento.- Dijo Liam, orgulloso del efecto que había causado en ella.
-No importa…- ya no recordaba muy bien a qué venía ese perdón, ya no recordaba que casi había sido atropellada por él.
Amplió su sonrisa.
-¿Subes?- Señaló el asiento trasero.
-¿Dónde vamos?- Fue la única pregunta que se le ocurrió para retrasar el momento en el que tendría que apartar la vista de él, obviamente la opción de la negativa no era una opción válida en aquel momento.
-Donde yo quiera- respondió Liam, a sabiendas de que aquel arrebato de orgullo podría ser decisivo para la respuesta de la chica, puede que se negara inmediatamente, por otra parte, aquella era su venganza, tenía derecho a llevar las riendas él esta vez. La observó cómo se debatía internamente.
Agradeció la presencia de sus gafas de sol mientras la recorría con la mirada, aquel blanquísimo vestido dulcificaba aún más su apariencia; sonrió ante el rubor de sus mejillas que jamás se convertiría en bronceado debido a la blancura de su piel.
-De acuerdo- se rindió.

5+2

Volvimos a la mañana siguiente a casa, ni siquiera habíamos dormido aquel día, pero mereció la pena, pasamos casi toda la noche con el Q&A, incluso llegó a enfadarse porque me quedé durmiendo en el momento en el que me contaba su primer viaje en avión, sus nervios, sus sensaciones y… mi despiste final. Tuve que cederle un punto ante su bronca, por lo que iba perdiendo, algo que no consentía después de mi astuta maniobra en el avión.
Al abrir la puerta de casa me encontré con una serie de maletas en la entrada, maletas que reconocí fácilmente, aquellas Samsonite no eran las de Zayn…
-¿Qué pasa?-.
-Volvemos a casa hoy, cariño- me aclararon.
-Ah… vale…- Y mi cerebro no tardó en idear un plan perfecto- Esto… el taxi de Zayn viene a eso de las cinco para llevarlo al hotel, puedo acompañarlo y luego llevar mis maletas (que no están listas aún) a casa-.
Obviamente, ni había ningún taxi contratado, ni había hotel, ni nadie iba a acompañar a nadie. Mis padres observaron a Zayn con curiosidad, preguntándose qué clase de relación tendríamos, el aludido, al no entender nada de lo que decíamos observaba tranquilamente la casa.
-Vale, pero luego cierra el apartamento con llave-.
Y… ¡listo!-.
-Claro-.
Pasamos el día entre playa y piscina, finalmente mi familia abandonó el apartamento antes de la hora de la comida con la intención de parar por el camino a comer. Agité las llaves orgullosa de mi astuto plan.
-Are we allowed to stay here?- preguntó Zayn inseguro.
-Yeah man-.
-Really?-.
-Yes!-Veía en su mirada que seguía sin creerme- Why should you stay in an hotel when we have this house?
-First, I don’t mind to stay in a hotel at all. Second, because this is not our house-.
-It’s almost-.
-No it’s not-.
-C’mon Zayn…Forget your conscience-.
-Ok- se encogió de hombros.
-Great, let’s go to the pool-.
-Whaaaaaaat? Nooo… Let’ sleep-.
-C’mon!!-.
Empate de nuevo: 2-2-.

5+2

Velocidad física jamás alcanzada, pero la velocidad de sus sensaciones iban mucho más rápido. Demi viajaba abrazada al chico, rodeándole la cintura con fuerza ante el miedo que le provocaba aquella velocidad. Avanzaban por los caminos de arena con las cabañas de los lugareños a ambos lados, pasando veloces ante ellos, estrellándose en algún lugar de su campo de visión tras su paso. Demi apoyó el rostro en su espalda, su camiseta ardía y aquella parte del hombro que no quedaba cubierta por el negro algodón lucía una suavidad extrema realzada por el brillo reflectante del sol en ella. Demi apretó algo más sus brazos alrededor del chico cuando éste aceleró para cambiar de marcha. Aspiró profundamente y sonrió.
Liam avanzaba a sus anchas por el camino que minutos antes había recorrido, lo había memorizado en apenas unos instantes y se dirigía con determinación a su destino. Notó la presión de los brazos de la chica cada vez que aceleraba. Condujo sin cuidado y a alta velocidad hasta que vislumbró el lugar que pretendía, bajó de marcha lentamente y dobló a la izquierda en el cruce.
Demi no pudo sino abrir los ojos ante la desaparición del sol que antes la cegaba, notó como la velocidad se había reducido imperceptiblemente. Ahora discurrían por un camino algo más tortuoso, plagado de piedras y vegetación por doquier, agradeció la sombra que aquel lugar le proporcionaba y descendió la presión de sus brazos conforme éste detenía la Harley.
La ayudó a bajar con cuidado y la acompañó de la mano al rincón que había descubierto gracias a las indicaciones (generosamente pagadas) de un trabajador del hotel.
Una diminuta aunque hermosa cascada descendía a un pequeño lago de agua cristalina cuyo fondo resplandecía, rodeado por vegetación, estampa digna de postal. La chica observó sorprendida y encantada el lugar dando vueltas sobre sí misma.
-Oh my god, this is beautiful-.
-Yeah…-.
La chica se deshizo de sus sandalias y corrió hacia el agua con energía. Se tiró de bomba y profirió un grito ensordecedor, Liam corrió tras ella con preocupación.
-Oh my god, it’s soooo cold!-.
Liam negó con la cabeza y se deshizo por fin de las gafas de sol, las arrojó a un lado, sonrió con picardía a su público femenino y se descalzó las adidas mientras su ajustada camiseta volaba por los aires.
Demi observó muy quieta desde su posición, conforme descendía el nivel de ropa del cuerpo de aquel chico, ella iba escondiendo el rostro en el agua helada. Finalmente observó con tan solo los ojos fuera del agua como el chico se deshacía de sus vaqueros.
Lanzamiento de cabeza, limpio y tremendamente deseado. Nadó hasta ella con facilidad.
Bucearon en sus miradas unos instantes y finalmente se fundieron en un acuático beso.
-You know?- susurró Liam recorriendo el cuello de la chica con sus labios- I liked this dress so much before but now… I think you don’t need it-.

5+2

Me desperté temprano, pero no quise abrir los ojos, me extendí a lo ancho en mi cama, comprobando así que Zayn no había dormido en toda la noche conmigo. Por la tarde acudí a devolver la llave del apartamento a mis padres, tras haber hecho una copia antes en una tienda especializada. Cuando regresé, él ya no estaba y mis llamadas eran ignoradas, sabía por experiencia que Zayn tenía debilidad por la desaparición, así que no le di demasiada importancia y me quedé dormida esperándole.
Escuché ruidos a mi lado, en la habitación y parpadeé lentamente, sin embargo, algo se abalanzó contra mí cuando tuve intención de abrir finalmente los ojos.
-Eh! No no no no- descubrí la voz de Zayn, que me regañaba por algo.
-What..?-.
Me estampó un beso un tanto bruto cegándome por momentos, después cubrió mis ojos con sus manos.
-We’re kissing; you can’t open your eyes!-.
-Oh… sorry…-.
-Wait-.
Con una mano me cubrió los ojos mientras con la otra manipulaba algo, descubrí después que se trataba del almohadón, ya que me puso la funda de la almohada como venda en los ojos.
-What are you doing with my house?- lloriqueé.
-It’s a surprise-.
-Surprises are good things, Zayn. You can’t burn my house and say that’s a surprise…-.
-Haha, so funny-.

5+2

Los dos permanecían tumbados en la hierba en ropa interior tras los susurros, las caricias y los besos en el agua.
Liam respiraba con tranquilidad preguntándose cómo actuar a continuación, un suspiro de la chica fue su pistoletazo de salida, se giró lentamente sobre sí mismo acercando mucho su rostro al suyo, la besó largamente, sin prisas disfrutando de cada célula de sus labios, separó el rostro con cuidado para recolocarse finalmente sobre ella y continuó trabajando solo con sus labios y sus manos, recorría con caricias cada parte de su cuerpo y con sus labios cada zona escondida de su cuello, la oreja, el pecho.
-Wait…- susurró ella- here?-.
-What’s wrong?- Siguió a lo suyo.
-Bugs!-.
Liam sonrió ante la preocupación de la chica en un momento como aquel. Igual no lo estaba haciendo tan bien. Decidió acelerar sus movimientos y endurecer sus besos. Dio resultado, en unos instantes, la chica acarició su espalda con seguridad empujándolo hacia ella.

5+2

-You won’t make me go down the stairs with this, will you?-.
La chica permanecía sentada en la cama con las piernas cruzadas tarareando de vez en cuando e intentando burlar la vigilancia de un atento Zayn. Los ruidos cesaron finalmente, la chica movió la cabeza a todos lados como si aquello la ayudara a ver.
-Zayn..?- silencio- Zayn?!-.
-Ok…- Zayn cogió a la chica de la mano- Stand up… Be careful!- rió cuando casi se tropieza.
La levantó y la acercó a la ventana.
-Well… are you ready?- asintió- sure?-.
-Yeah! C’mon!- hizo ademán de quitarse la funda de los ojos, pero el chico sujetó sus manos. Tras asegurarse de que seguía quieta desató la funda él mismo.
La chica abrió mucho los ojos y los labios sorprendida, miró unos instantes a su alrededor y cuando, finalmente descubrió de qué se trataba se llevó las manos a la cara y las lágrimas acudieron a sus ojos.
-Oh my god-.
Volvió a recorrer con la mirada su nueva habitación, su ventana daba a un nuevo paisaje, antes una simple pared blanca le impedía cualquier vista, sin embargo ahora habían pintado sobre la misma pared, con una paradisíaca playa. A simple vista podía parecer una playa más, de arenas blancas y aguas celestes, pero la vista se extendía por el interior de la habitación, del soleado paisaje exterior. Las paredes interiores de la habitación  también habían sido redecoradas, palmeras inalcanzables, soles más brillantes, en el techo se fundía el día y la noche, de manera que justo en el otro extremo de la habitación estaba oscureciendo, y en el cabezal de la cama, muy alejada se distinguía la hermosísima arquitectura de la ópera de Sydney. Toda la habitación parecía haber sido transportada a otro continente sin dejar de estar en España.
-That’s what you’d see if you’d wake up in Australia-.
-How did you do?- balbuceó incrédula.
-It was hard, but you sleep like a baby- se rió.
-Oh thank you so much!-.
El chico se acercó y la rodeó con los brazos abrazándola por la cintura.
-You like it, then?- comenzó a darle besos por los hombros.
-Yeah, it’s amazayn!-.
Se deshizo de las caricias del chico y siguió paseando observando con detalle cada planta, cada estrella, cada gota de agua, cada grano de arena que habían aparecido de la noche a la mañana estampados en su habitación.

5+2

Volvieron al poblado renovados, la chica ya no apretaba muerta de miedo los abdominales del él, el chico ya no sobreactuaba para llamar la atención de ella. Pararon en la puerta del hotel.
-Well… it was nice to meet you…- bromeó él.
-So nice…- sonrió.
-See you- dijo mientras arrancaba la moto de nuevo.
-Wait! There’s a party tonight at the beach… -.
-See you tonight, then-.
Las hogueras se extendían por toda la playa y los grupos de amigos con ellas, la barra del chiringuito estaba abarrotada, Demi se había cambiado el vestido por uno más colorido, más dulce y más corto, además se había peinado para un lado, colocándose una graciosa flor en el pelo a juego con su vestido.
Liam sabía que se la cargaría, debía devolver la Harley por la tarde, pero le hacía sentirse tan bien que no pudo aparecer en la fiesta sin ella, se deslizaba por la arena como si volara. Apareció con sus mismos vaqueros, sus deportivas y su ajustada camiseta, decidió que sería una horterada vestir las gafas de sol a aquella hora.
La vio cerca de la barra sonriente, se guardó una sonrisa para él mismo y caminó hacia ella. No tardó en descubrir que se encontraba rodeada de chicos, incluido el de aquel chiringuito del día anterior, todos tenían un parecido, rubios de proporciones altísimas y rostros albinos.
-What’s up?- Se introdujo en la conversación sin más.
-Hey man- le miraron con discrepancia, el más alto de todos le propició una mirada de arriba abajo, sería un rival algo igualado- Are you looking for something?-.
A Liam no le gusto demasiado el tono soberbio de la pregunta, pero jugó sus cartas y contestó:
-Yeah, mate any booze should be ok-.
Ambos se miraron largamente, retándose con la mirada, parecían estar teniendo una pelea interna a cámara lenta, terminaron de mirarse prácticamente a la vez y Liam se giró hacia ella.
-What are you doing here?-.
-Well… I told you I was coming…-.
-Alone-.
-I didn’t say that-.
-Don’t bother the girl, c’mon- intervino otro chico diferente.
-Hey, dude, shut the fuck hell up!- se agitó Liam.
-Don’t shout to my brother!- de nuevo intervino el primero de los chicos.
-Where’s my booze?-.
-Take your booze!- el desconocido optó por tirarle el contenido de su vaso a Liam.
El empapado se quedó petrificado por unos instantes, luego sin mirar a su agresor, recorrió con su lengua su mandíbula inferior, se apartó el pelo mojado de los ojos. Y atacó.
Demi observó el impacto del puño de Liam sobre la cara de aquel enorme gorila, oyó el sonido de los huesos al crujir y ahogó una mueca de dolor. El chico empezó a sangrar y, sin ser plenamente consciente de ello, se tiró sobre Liam arañando, golpeando, pataleando y gritando.
Él reaccionó sin pensárselo mucho y también devolvió cada golpe, cegado por la rabia de una discusión probablemente ya olvidada. Ante la brutal paliza que ambos estaban recibiendo, Demi intentó intervenir para pararlos, sin embargo, no pudo hacerlo sin la ayuda de Danny y su otro primo.
Sujetaron al chico por los hombros mientras Liam se sacudía la sangre, propia o no de la cara. La chica lo cogió del brazo y lo sacó de allí
Caminó mirando al suelo avergonzado hasta la habitación del hotel. Demi cerró la puerta tras de sí, sin saber muy bien cómo tomarse todo aquello, quizás el juego había ido demasiado lejos. El chico se sentó en la cama cansado y resopló un par de veces, luego por fin miró a Demi a los ojos.
Tenía una inflamación en la mejilla un tanto indecorosa, una de sus cejas también había sufrido un percance y un hilillo de sangre descendía por su angelical rostro. Sonrió. Por algún extraño motivo, esa sonrisa le pareció tan desesperadamente irresistible que se abalanzó sobre él.
Liam pareció sorprenderse al principio, pero no tardó en olvidarse de todo, de las magulladuras, de los golpes de aquella noche, de su Harley abandonada… Se centró solo y exclusivamente en ella.
Dejó que toda la frustración de la pelea le recorriera, sus acciones se volvieron más bruscas, donde antes había besos, ahora había mordiscos, las caricias se convirtieron en una incesante búsqueda de placer por todos y cada uno de los rincones de sus cuerpos.
Demi correspondió a ese arrebato del chico con incredulidad, pero se dejó llevar hasta el infinito. Tras cada beso, el sabor de la sangre recorría su garganta, quizás fuera la suya propia o quizás la de Liam tras la pelea, con ese pensamiento volvió a buscar sus labios con el simple juego de descubrirlo, definitivamente, la sangre era de él, aquello le excitó de tal modo que apresuró más al chico.
Ambos se rindieron finalmente al placer, recorriendo cada centímetro de la cama y olvidándose de pensar.
Probablemente, al terminar volverían a pensar y no les parecería tan agradable el hecho de encontrar el cabezal de la cama roto y el veraniego vestido nuevo de Demi hecho trizas.

5+2

-And this…- extendió una bandeja repleta de frutas exóticas ante mi- would be the breakfast you’d take there-.
-Awww… thanks again!! Can I eat them on your naked body?-.
Soltó una carcajada.
-Maybe another day. For now…- se levantó sin dejar de mirare, para estar seguro de que no me levantaba y le seguía, salió a la terraza y volvió con algo entre los brazos, esa vez sí, las lágrimas salieron de mis ojos sin que él pudiera evitarlo.
Depositó suavemente el bebé koala en mi regazo, sin poder evitar reírse de mí.
-It’s… it’s mine?-.
-Well…- se entrecortó- I… I… couldn’t… get it,- se giró hacia la terraza y entró el que probablemente sería el cuidador del zoo- but you can name it as you like!-.
-Really? Oh well… I think this baby koala needs a beautiful name as yours… I’ll name it… Kingzayn!-.