4ever Yours (49) Someone's watching over me.

-¡No, Marina, no!

Salí de la habitación enfadada, dispuesta a contestar.  En tres zancadas estaba en medio del pasillo gritándole al maldito teléfono.

-Eres un hijo de puta.

-Mmm… qué boca más sucia.

-¿Cómo has sido capaz?

-Aún nos has visto nada.

-¿Por qué haces esto? ¿Qué quieres?

-¿No es evidente?

-Deja en paz a mis amigos.

-Descuida, vamos a pasar a un nivel superior ¿Sí? ¿Qué tal tu “primo”? ¿O tú supuesto novio?

-Ni lo pienses.

-Tarde.- La llamada se cortó.

Las piernas me temblaron, me sentía demasiado débil. Los chicos habían escuchado toda la conversación y acudieron a mi alrededor preocupados.

-¿Era él?- preguntó Niall compasivo.

-Ha dicho que los siguientes son Harry y Zayn…

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Demi pasó todo el fin de semana en el hospital, pero los médicos eran optimistas y solo daban buenas noticias a sus amigos. Además el médico que llevaba su historial había prometido que en breves estaría de vuelta en casa, aunque con serias condiciones que todo su arsenal de conocidos se encargarían de llevar a cabo.

Por supuesto, todos seguían preocupados por las llamadas a Marina, quien intentaba ignorarlas, pero todos comprendían la angustia a la que estaba sometida. La chica salió de la habitación en la que todos acompañaban a Demi durante horas, incluso habían llevado juegos de mesa y cartas para distraerse, y alguna que otra revista. Todos los ojos la siguieron cuando abandonó la estancia.

-Debería contárselo a la policía.- Sugirió Demi.

-Ya hemos ido, esta mañana- explicó Niall.- Pero nos han dicho que no pueden hacer nada aún, han registrado las llamadas pero ha conseguido desviarlas, sin ninguna pista poco más pueden hacer.

-Que llevemos cuidado, nos dicen…- Zayn también parecía tan agotado como el propio Liam, que a pesar de las alentadoras palabras de los médicos llevaba días sin dormir.

-No puede durar para siempre, chicos- animó Demi, a pesar de ser la que peor parte se había llevado, parecía la única que no fingía estar en un velatorio.- Se acabará cansando.

-¿Y cuántas veces nos tendrá que joder hasta que eso ocurra, Demi?- insistió Liam.

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Por suerte para mí, la máquina de café no estaba en reparación, cosa extraña. Seleccioné un café con leche y pulsé el símbolo + para añadir el máximo de azúcar. Mientras se vertía el delicioso líquido que me impediría caer dormida una vez más, Harry apareció a mi lado y se sacó un chocolate.

-¿Sigues vivo, Styles? ¿Con todos los miembros en su sitio?

Soltó una leve sonrisa.

-No va a pasar nada, Marina. Hasta he contratado el doble de seguridad.

-¿Y Zayn?

-No va a pasarle nada…

-Ya has visto lo que le hizo a Demi ¿Cómo puedes estar tan seguro?

Suspiró, no lo estaba, ni él ni nadie.

-Siento que tengas que recurrir a esto.

-No te preocupes, no es culpa tuya. Además, ya vivo con guardaespaldas en el trabajo, podré vivir con ello también en mi vida diaria.

-Me estoy replanteando todo, Harry ¿Qué hago aquí?  No estudio, no trabajo, soy una carga para Zayn y para Liam y Demi; y encima ahora esto, os estoy exponiendo a algo que ni yo sé cómo controlar. Creo que debería volver a casa.

Levanté la mirada de mi vaso de plástico para mirar a mi acompañante que estaba ensimismado con su atención en otra parte.

-¿Sabes?, no eres muy buen psicólogo, Styles.

Tras esto, sí me miró directamente a los ojos.

-Estaba tratándome de imaginar cómo se sentirían Zayn y Demi si te perdieran de esa forma, por cobardía.

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De mientras, en la habitación, se encargaban de empaquetar las cosas de la hospitalizada con la intención de volver a casa.

-Te han mandado mucho reposo.- Repetía Niall de memoria.- Así que nada de alteraciones.

-Tranquilo, tendrá reposo.- Aseguró Liam.

-Tú también deberías descansar…- Demi se sentía algo preocupada por su novio, que parecía más desgastado que nunca.

-Sí… Pero tengo que decirte una cosa Demi,- ambos se miraron seriamente- ¡Y no quiero que te pongas histérica porque la decisión ya está tomada!

-Me estás asustando, Liam…

La chica miró a Niall en busca de ayuda, pero éste desvió la mirada, lo que solo podía suponer que lo sabía y también se esperaba una reacción desmesurada por su parte. Solo le quedaba Louis quien la miró sonriente pero se encogió de hombros, dándole a entender que ya nada se podía hacer. Zayn estaba llamando a varios taxis y Harry y Marina seguían en la cafetería.

-Verás… creo… creemos- se corrigió.

-¿Quiénes?

-Todos… Bueno, creemos que ya que el médico te ha mandado reposo y la vida del pequeño ha estado en juego, necesitarás estar separada de los escándalos por un tiempo.

Llegados a este punto Liam miró a su novia profundamente, quien todavía seguía sin entender lo que “ya había sido decidido”.

-¿Me quieres enviar al monte con las cabras?

-No… Pero lo que más te alteraría sería estar cerca de Marina, con sus llamadas, sus visitas a la policía…

-¡¿Qué?!- la rubia por fin empezaba a comprenderlo- ¡No pretenderás echar a Marina de casa!

-No la echo…

-Por Dios, Liam ¿Cómo puedes ser así? ¡No es un gato que se hace pipí en las alfombras y por eso lo echas de casa!- Louis soltó una risita y se llevó una severa mirada de Liam.

-No lo echo, Demi ¡Déjame hablar! Marina va a irse a vivir con Zayn por un tiempo, mientras se aclara esto ¿De acuerdo?

-¿Y se puede saber, oh gran mente pensante, qué adelantaremos con eso?

-Adelantaremos que no estés pendiente de quién llama o deja de llamar.

-Pero es mi amiga.

-Ella lo quiere así.

Tras eso, Demi no pudo encontrar ninguna pega más a la proposición de Liam, si Marina se sentía más segura con Zayn, era de entender que prefiriera estar con él durante aquellos momentos. Pero la realidad era, que ni siquiera Marina sabía el plan de los chicos…

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Harry, avisado por un whatsapp de Zayn, advirtió a Marina que los taxis ya esperaban en la entrada.

Sin embargo, Marina no tardó en sentirse extraña cuando no subió con Liam y Demi sino con Zayn.

-Marina…- Las intenciones de decir algo importante eran más que evidentes, la chica le miró interrogante- Liam thinks it is not safe you living in their house… for Demi, I mean… Because of the phone calls and so…

-Yes, of course it is not…- La chica habló con un hilo de voz. Desde luego, no era seguro para Demi ni para el bebé y aunque lo comprendía, Marina no quería verse sola en aquella situación.- Should I stay in a hotel?

-What? No! No way! You’ll come home with me.

-Oh… but then you won’t be safe Zayn… I think a hotel will be better, I cannot pay for it right now but if you pay it… I’ll return you the money soon.

-Baby, you’ll stay home ok? This… it is just a crazy idea from Payne, he’s very nervous… he hasn’t slept for days… you know, but don’t worry it doesn’t mean a thing.

La chica asintió con la cabeza.

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Llegamos a su casa tras casi una hora de viaje. Estaba a las afueras de Londres, un barrio suburbial encantador. Era casi de noche, aunque se podría apreciar el ambiente tranquilo y relajado de la zona, algo que encajaba con el estilo de vida de Zayn.

Supuse que, previsores como eran, Zayn y Liam ya tendrían mis cosas allí. Efectivamente. El chico me hizo un tour guiado por la planta baja, cocina, salón, baños. Luego me acompañó al primer piso donde estaban las habitaciones.

-Esta es la mía.- Señaló la primera puerta- Y esa es la de Anthony, aunque no lo verás mucho, se pasa el día encerrado entre porros y pajas… Aunque él dice que estudia.

-Puede que porque estudiar es lo que hace…

Me miró entrecerrando los ojos.

-Ya veo en qué bando te vas posicionando, el bando equivocado a mi parecer, pero tú misma…

Solté una carcajada, probablemente era la primera vez que reíamos en mucho tiempo.

-Y mira, esta es la tuya.

Abrió una tercera puerta y un agradable olor floral nos envolvió, era una pequeña estancia decorada deprisa pero con mucho mimo, en tonos blancos y crema. El edredón tenía un estampado de flores precioso.

-Mmmm… El portátil del escritorio es uno viejo que me traje de Bradford, pero creo que aún funciona por si quieres usarlo… Esa puerta da a una terrazita, esta al baño, y esta… juraría que es un armario- abrió la puerta en cuestión para comprobarlo- sí efectivamente, es un armario.

Le sonreí entre agradecida y derretida por los detalles.

-Muchísimas gracias.

-Muchísimas de nadas- se adelantó y me cogió las manos.

Nos abrazamos largamente sin decir nada, por algún extraño motivo sentí impulsos de llorar y descargarlo todo, pero entonces comprendí que lo único por lo que me permitiría llorar sería por perderlo a él.

-Voy a bajar a hacer la cena… ¿Algo que te apetezca especialmente?

-No…- sonreí pensando que cualquier cosa cocinada por él me sabría a trocito de cielo.

-Bien… si te quieres cambiar, duchar o lo que sea, tienes las cosas ahí…

-Gracias otra vez.

Se despidió con una sonrisa y cerró la puerta tras de sí.

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Tanto Harry como Niall se habían auto-invitado a pasar la noche en la casa Payne mientras Louis y Liam hacían la cena. Demi apareció en el salón tras un largo y relajante baño de espuma. Se encontró a los amigos vagueando en el sofá, con la tele encendida y sin prestarle ningún tipo de atención.

-¿Dónde has dejado a Louis, Hazz? Debes de sentirte solo.

-No que va… Niall me hace buena compañía.

-Claro, porque Niall es la mejor compañía que puede tener nadie.

-Gracias Blondie.

-De nada Blond. Por cierto… a pesar de lo ocurrido aún hay un montón de cosas que organizar para la boda.

-Lo sé, aunque Louis y yo estuvimos decidiendo cosas- Conforme avanzaba la frase, su tono de voz disminuía, lo que hizo sospechar a Demi.

-¿Y bien?

-Mañana tendrás que ir a probarte vestidos.

-¿Perdón?

-Contratamos a una firma muy importante y solo nos dieron cita para mañana o para después de la boda…

-¿Quién os dio permiso para hacer eso?

Niall permaneció callado en busca de una excusa cuando Harry se adelantó.

-Marina.

-¿Cómo? Si Marina no se preocupa por estas cosas.

-Pues ahora sí, como parte de mi familia que es, está obligada a preocuparse por las cosas de familia…

-Ya… de todos modos, da igual. Me encanta el detalle, chicos.

El irritante tono de llamada de un Iphone comenzó a sonar, Harry rebuscó en sus bolsillos, Demi no pudo evitar sentir cómo le daba un vuelco el corazón y se acercó más a Niall en el sofá, quien a su vez también se puso algo tenso. Las miradas se centraron en Harry, comprobó la pantalla y sonrió.

-Heyy budiiiieee!!- contestó levantándose y excusándose con una mirada de sus amigos- Yeah what’s up?

Demi y Niall volvieron a respirar más tranquilos, aunque ninguno fue capaz de decir lo que se les había pasado por la cabeza.

-Si saluda con un budie largo, se trata de su primo Matt.

-Oh… vale…

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Salí de la ducha y no tardé en encontrar una mochila con mis cosas más básicas. Me vestí con la ropa más cómoda que encontré y encendí el ordenador, necesitaba contactar con mi antigua vida y asegurarme de que, por lo menos esa antigua vida, estuviera intacta.

Aunque no conseguí lo que esperaba. Nada más encender el anticuado ordenador, la pantalla se puso negra, por lo que pensé en apagarlo y fingir que no había tocado nada, entonces saltó la imagen…

Me quedé bloqueada, intenté gritar el nombre de Zayn pero mis cuerdas vocales no respondían, me tapé la cara con las manos, por muy simple que pareciera, ver aquello era como ver la más horrible de todas las pesadillas… Sabía lo que era y también sabía que probablemente la imagen estuviera siendo grabada a tiempo real. Necesité algunos segundos más para intentar que mi respiración se acompasara, y le llamé.

Pareció una eternidad lo que tardó en llegar hasta la habitación, a pesar de lo apresurado que noté su paso al subir las escaleras.

-What’s wrong?- entró preocupado.

Entonces la pantalla se volvió negra.

-Oh shit…

-What was that?- preguntó alarmado.- Why are you shanking?

-Zayn… I just saw my room… in Liam’s house.

-What?! No, it is not possible.

De nuevo una imagen volvió a la pantalla, también a tiempo real, pero de una habitación diferente… de aquella.

-Oh God…-lloriqueé.

Zayn buscó el punto exacto de dónde provenía la imagen y encontró la cámara con la que estábamos siendo grabados y la desconectó de un tirón.

-Hey Ant!- le llamó.

El compañero de piso no tardó en aparecer y se quedó petrificado al ver la mini cámara en las manos de Zayn.

-What the fuck is that?

-Did you know?

-What? Are you crazy? Of course not! And I have been home all day!

-Let’s call the police.

Pero tras unos segundos en los que la pantalla estuvo oscura, una nueva habitación volvió a aparecer, esta vez, una desconocida para mí. Zayn se acercó al ordenador e inspeccionó con seriedad la imagen.

-Oh fuck… That’s Louis and Harry’s guest room.

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Liam y Louis entraron y se encerraron sin más en la cocina, dispuestos a sorprender a sus invitados. Sin embargo, Liam pronto se arrepintió de su acción, así que salió de la cocina, entró al salón, saludó a sus compañeros y dio un largo beso a su novia. Sin decir nada más, volvió al ataque junto a Louis.

-Se le nota más animado- aseguró Niall.

-Lo está, el hecho de no tener a Marina en casa parece alegrarle…

-No seas bobo, Harry, después de todo lo que ha pasado merece un poco de tranquilidad en casa.

-Sí- intervino Demi al final- y en lugar de eso, lo que tiene son amigos gorrones que le obligan a cocinar.

-¡Oye oye! Que nosotros no le hemos obligado a hacer nada.

-Baby!- gritó Demi refiriéndose a Liam.

-Yes honey?- respondió desde la cocina.

-What are you doing?

-A special meal that Niall loves!

-You see?- Demi se nombró a sí misma ganadora tras ese comentario de Liam, dando a entender que, a pesar de no haberle pedido nada a Liam, éste siempre se esforzaría por contentar a sus amigos.

-And you will have a special dessert too Harry!- se oyó la voz de Louis.

-Don’t talk about our sexual life in public, Boobear!

-It’s a cake, you idiot!

En medio de todo aquel ambiente rebosante de bromas, de nuevo un teléfono volvió a sonar. Provocando el mismo efecto que la vez anterior, todos se tensaron en seguida, las risas cesaron y fueron sustituidas por miradas incómodas.

Puesto que la dueña de la casa no parecía muy dispuesta a contestar, Liam abandonó su trabajo en la cocina y descolgó el aparato.

-Yes? It’s Zayn- anunció a sus compañeros que, de nuevo respiraron tranquilos- Tell me mate.

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-Vamos a ver, no quiero que te alteres ¿Vale, tío?- comenzó Zayn.

Sin embargo, esa  frase, lejos de tranquilizarlo, lo alteró más.

-¿Qué ocurre? ¿Estáis tú y Marina bien?

-Sí, estamos bien ¿Por allí todo bien?

-Claro.

-Genial, mira te llamo porque…- Zayn comentó toda la historia, del ordenador y de las cámaras espías. De hecho, Liam fue hasta la habitación que la chica había ocupado durante su estancia en la casa y no tardó en encontrar la cámara en el lugar exacto en el que Zayn le indicó.

-Y Harry y Louis también tienen una en su casa…

-Joder, joder, joder…- Liam se encontraba en estado de shock y aún no sabía muy bien cómo reaccionar.

-Escucha, yo acabo de llamar a la policía y me han dicho que tardarán una media hora en venir, más vale que hagas lo mismo.

-Madre mía Zayn… ¿De qué va todo esto?

-Creo que…- el chico bajó la voz- creo que quería tener controlados todos los lugares en los que pudiera quedarse.

-Esto está yendo demasiado lejos.

-Es como una película de terror.

-En fin… voy a ver cómo se lo explico a los demás.

-¿Están todos en tu casa?

-Todos…

-Uff, buena suerte.

-Llámame cuando te diga algo la policía.

-Descuida.

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Insistía en que descansara, creo que no era consciente de lo que acababa de ocurrir, de hecho, lo notaba demasiado tranquilo.

-¿Cómo puedes estar tan tranquilo?

-No lo estoy. Lo estaré cuando llegue la policía y me diga algo.

Todos permanecimos en la cocina mirando a nuestro alrededor, probablemente los tres estábamos más asustados de lo que podíamos reflejar… y mi reflejo  estaba realmente asustado.

-Marina, de verdad, vete a dormir. Te despertaré cuando la policía me diga algo.

-No tengo sueño.

-Sí lo tienes.

-Da igual, no podría dormir…

-Sí, sí podrás- Algo me decía que él ya había dado por hecho que yo sobraba en la cocina.

-Please Zayn- lloriqueé- I don’t wanna sleep there…

-Oh… ok…- Hizo un gesto de comprensión- Go to sleep in my bed, then.

Seguí sin moverme. Parecía confuso, pero por fin entendió que no subiría sola, le dirigió una mirada a su amigo y se levantó de la silla.

-C’mon.

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Tras la noticia de Liam todos permanecieron estupefactos, Harry cogió la cámara de la mano de Liam y la examinó.

-¿Y la ha estado grabando desde que llegasteis?

-El piso es nuevo, y la verdad es que con la mudanza ha entrado tanta gente que no sabría decir si alguien la puso ahí.

-Pudo contratar a alguien, a algún empleado de la mudanza…

-Sí, pero ¿Cómo sabría en qué cuarto colocarla?

-De todos modos, esta teoría sería válida para la casa de Liam y la vuestra chicos, pero ¿Qué hay de la de Zayn? Él tuvo la mudanza hace mucho más tiempo…

-¿Creéis que el acosador ha podido entrar a las tres casas sin que lo supiéramos?- preguntó Demi asustada, obviamente era lo que todos estaban temiéndose, pero fue la única capaz de formular una pregunta en voz alta.

-¿Habéis llamado a la policía?- Ante la falta de respuestas, continuó el interrogatorio.

-Sí, la inspectora Rush y su ayudante están de camino.

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Me quedé en el umbral de la puerta de mi cuarto hasta que comprobé que su respiración se había ralentizado. Estaba dormida. Cerré la puerta y bajé junto a Ant, la policía no tardó en llegar.

Empezaron con las típicas preguntas, ¿Qué ha pasado? ¿Quién creen qué ha podido hacerlo? Inútiles, si lo supiéramos no necesitaríamos sus servicios. Les observé exasperado mientras Ant contestaba a todo.

Por fin pidieron que les enseñáramos el lugar. Subimos a la habitación de invitados.

-En ese ordenador se vio la imagen- señalé- ahora solo sale la habitación de la casa de unos amigos míos porque llamé al otro para que la desconectara.

-Entiendo… ¿Cuál de ustedes duerme aquí?

De nuevo me entraron ganas de golpearle, no se podía ser más incompetente… para ser policía, no era un genio de los detalles, obviamente aquella habitación era demasiado femenina para mí o Ant.

-Nadie, es la habitación de invitados, igual que esa- señalé la pantalla.

-No tienen ningún invitado, hoy, imagino.

-Sí, sí que lo tenemos. Mi amiga puso una denuncia por un acosador, su caso lo lleva la inspectora Rush.

-Ah, Rush… Bien, bien está en buenas manos…

-Ya…- me lamí los labios intentando aguantar la rabia que sentía.- ¿Piensan… esto… hacer algo?

-Nos vamos a llevar el ordenador y la cámara, y nuestros técnicos intentarán averiguar a qué ordenadores más va dirigida la señal de esas cámaras.

-Gracias…- dije sin mucha esperanza.

Despedí a los dos policías. No estaba más tranquilo, pero llamé a Liam para comentarle lo qué habían dicho los dos hombres. La inspectora tampoco les había dicho mucho más a ellos. Suspiré y me pasé la mano por los ojos. Quería dormir… Pero antes le debía una explicación a Ant, él estaba al corriente de todo, pero esto no era algo que podría esperarse. Lo encontré en la buhardilla, lugar donde teníamos ubicado el salón más grande de la casa. Estaba viendo una película bélica, típico de Ant. No hizo ningún movimiento hasta que me senté a su lado.

-Menuda mierda tienes encima, colega.

-Lo sé…

-¿En serio no tienes ni idea de quién…?

-No, Ant, no tengo ni idea.

-Tío… tienes muchas fans, si alguna se ha enterado de lo que hay entre los dos igual…

-No sé… no creo, Ant. Si fuera una fan no llegaría tan lejos, además parece que va solo a por Marina… y  a por los que la rodean.

-O sea tú.

-¿Crees que he hecho mal trayéndola aquí?

-No, no, eso no me preocupa… bueno no hasta ahora.

-Entiendo… no te preocupes, tío, nos iremos mañana a…

-No, no, quedaros aquí. Me iré yo.

-¿Seguro?

-Sí, tranquilo, además echo de menos a Danny.

-Dale recuerdos.

-Claro.

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En la casa Payne las cosas iban diferentes… Por supuesto, ninguno podía dormir, así que se habían dedicado durante toda la noche a jugar a los dardos, al monopoly al que Liam había resultado vencedor y habían hecho café para toda la noche, obviamente idea de Demi.

Llegados a un punto, todos se sentían tan cansados que el único que hacía el mínimo movimiento era Louis para cambiar de canal.

-Por cierto Hazz…

-Mmm…

-Antes en el supermercado, hemos visto a tu primo Matt.

Harry dio un brinco y miró seriamente a Louis, los demás lo miraron confundidos.

-¿Cómo? ¿Estás seguro de que era Matt?

-Que sí, joder, si hemos hablado con él ¿A qué sí, Liam?

-Aha…

-¿Qué ocurre Harry?- preguntó Demi a sabiendas de que horas antes Harry había recibido una llamada de Matt.

-Antes he hablado con Matt, estaba en Cheshire, en mi casa, en una comida familiar.

Todos se incorporaron lentamente mirándose unos a otros asustados.

-No vayamos a alarmarnos antes de tiempo- intervino Louis que ya estaba demasiado cansado de las paranoias que el acosador les estaba causando.- Llámalo otra vez.

-Son las tres de la mañana, Louis.

-Da igual, llámalo.

Harry obedeció, y puso el teléfono en altavoz para sentirse algo más protegido.

-Hey Harry!!

-Budiiieeeeeeee- suspiró y mostró una enorme sonrisa- What’s up? Sorry for calling so late but…

-Nothing we’re just having a familiar meal in your house.

-Wh-What? Now?

-Yeah, yeah, you mom is here too, do you wanna talk to her?- Harry ya no respondía, se había quedado blanco y la sonrisa había desaparecido, pero la voz de Matt seguía hablando:- Hahahaha, yeah you’re right… Hahaha sure! ... Sorry, man I have to go… Ok, love you, bye!

-Harry… ¿Eso era?

-He hablado con una grabación antes.

5+2

Me desperté con el sonido de un grito, un grito femenino, el grito de Marina. Abrí los ojos de golpe. Estaba en la buhardilla, solo, la tele seguía encendida; con la habitación a oscuras el brillo televisivo daba un aspecto espeluznante a la buhardilla. Me levanté del sofá y apagué la tele. Confiaba plenamente en que el grito hubiese sido una pesadilla, aun así me dirigí a mi cuarto.

La casa estaba tan quieta que incluso me permití el lujo de asustarme. Eché un rápido vistazo por la habitación de Ant, que se había quedado dormido con el mando de la play encima.

Después me dirigí a mi cuarto. El grito había sido un producto de mi mente, Marina seguía dormida, en la posición exacta en la que se había dormido hacía escasas horas. Me descalcé y me tumbé en el lado opuesto, ni siquiera me di el lujo de meterme entre las sábanas.

5+2

Me desperté con la luz del sol, aunque más me hubiera valido seguir durmiendo. Recordé todo lo de la noche anterior y deseé no haber despertado jamás. Me giré en la cama con la intención de bajar a descubrir qué había dicho la policía, pero puede que la información viniese a mí antes del desayuno.

Zayn estaba en la cama, me quedé pasmada observándole dormir, recorrí cada línea de su rostro, desde las largas pestañas hasta la mandíbula, sus labios estaban algo separados y su piel, a pesar de estar a medio afeitar, era tremendamente tersa. Sus párpados temblaron, contuve la respiración hasta que sus ojos vieron la luz del nuevo día. Sonreí.

-¿Qué dijo la policía, Zayn?

Él puso los ojos en blanco y  volvió a cerrarlos, probablemente sus pensamientos al despertar fueron los mismos que los míos. Asco de realidad.

-Perdón… ¿Has dormido mucho?

Aun con los ojos cerrados asintió con la cabeza. Con ese gesto pude notar su cansancio, su fuerza y todo lo que estaba haciendo por mí. Se me inundaron los ojos de lágrimas y me dispuse a levantarme para llorar lejos de él. Pero mientras buscaba con mis pies unas zapatillas que parecían huir de mí y esconderse bajo la cama, las lágrimas no aguantaron más así que me levanté sin más. Sin embargo, algo me retuvo, Zayn me cogió la mano y me atrajo hacia él, quedé apoyada sobre su pecho mientras me acariciaba el pelo.

-Si vas a llorar, no hace falta que te escondas.